Los petroleros independientes exigen pleno acceso a la red e CLH, antigua Campsa

La recién creada Unión de Petroleros Independientes (UPI), que agrupa a las compañías que distribuyen y comercializan el 5% de los productos petrolíferos que se venden en España, criticó ayer duramente la falta de acceso a la red de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH), antigua Campsa. Esta nueva asociación, integrada por Petróleos Avanti, Dyneff Española y las Estaciones de Servicio de Guipuzcoa (Esergui), asegura que de darse un libre acceso a la red logística a terceras compañías "como ocurre en el resto de Europa", los precios serían más competitivos."Se beneficiarían las compañías independientes y, por supuesto, 1 consumidor final", aseguró José Antonio Lecea, presidente de la nueva asociación del sector energético.

De hecho, las compañías que integran la UPI, que operan en Cataluña y el País Vasco debido a que en ambas comunidades hay una red logística abierta a todos los operadores -por la terminal Capesa, en el primer caso, y la proximidad de la frontera francesa, en el segundo- están en la actualidad fijando unos precios de hasta cuatro pesetas por debajo del que cobran otras compañías al consumidor final. Las compañías independientes no llegan a Madrid o al sur de España, argumenta Lacea, "porque nuestra logística para llegar a estas zonas está llena de dificulades y depende de CLH".

Los representantes de esta nueva asociación aseguraron que están en negociaciones con la Administración y CLH para conseguir que se dé pleno acceso de la logística a terceros operadores. De producirse esta apertura, la presencia de los independientes en el mercado español podría subir del 5% actual al 15%-20% en cinco años. Frente a esta cuota de mercado, Repsol, por ejemplo, tiene el 60% de la distribución, seguido por Cepsa y British Petroleum. (que adquirió Petromed). Este reparto choca con el del resto de los países europeos, destaca la UPI, donde la cuota de los independientes oscila entre el 21% de Alemania y el 45% de Francia.

Algunos miembros de la UP criticaron la política a la baja de los precios que está siguiendo Repsol -los fija dos o tres pesetas por debajo del precio máximo que publica el Ministerio d Industria, cuando este último añaden las mismas fuentes, está "ya de por sí ajustado a la baja"- en su lucha poerder cuota de mercado. La misma fuente cifra en 25.000 millones la cantidad de dinero que Repsol puede dejar de ingresar este año por seguir esta estrategia.