Los reparadores de trenes de Villaverde no secundan los paros

Los trabajadores de los talleres de reparación de trenes de Villaverde Bajo, los más batalladores durante la huelga de abril, han desaparecido durante los paros de estos días. En vez de concentrarse a pie de vía para cortar el paso a los trenes como hicieron la huelga pasada, han decidido continuar con su labor habitual: reparar locomotoras cansadas. La decisión tomada por los trabajadores de Villaverde ha contribuido a que la nueva tanda de paros iniciada esta semana en Renfe discurra sin apenas incidencias.La mayoría de los 773 trabajadores del principal centro de mantenimiento de Renfe decidió el pasado 19 de mayo en asamblea no ir a la huelga convocada por los sindicatos para neutralizar la reducción de plantilla (más de 9.000 puestos) prevista en el plan estratégico de la compania.

No es que se hayan vuelto atrás, aclara un representante sindical, sino que "la asamblea pensó que había que dar más margen a la negociación, aunque si las con versaciones no fructifican se volverá a la huelga". Según la empresa ferroviaria, ayer sólo se registraron retrasos en dos trenes, por accionamiento indebido de los frenos de emergencia, aunque los sindicatos lo achacan a problemas técnicos. Los sindicatos también discrepan en el índice de seguimiento de los paros, que sitúan en el 80%; para la compañía no supera el 20%.

Ayer, los viajeros no encontraron demasiadas dificultades para llegar a sus trabajos, ya que los servicios mínimos (entre el50% y el 75% de los trenes habituales) funcionaron con normalidad. La huelga se notó algo más en el tráfico de la ciudad y en las carreteras de Extremadura, Andalucía, La Coruña y en la M-40,donde los atascos duraron más que otros viernes. Los paros en Renfe se repetirán el lunes, y coincidirán con la huelga de los autobuses interurbanos y de transporte escolar.