"No creo que hubiese conjura tras el asesinato de Colosio"

Pertenece el procurador Diego Valadés, de 49 años, a la generación de políticos que creen que el camino de México hacia la modernidad es irreversible. Ex embajador, reconocido jurista y vinculado la Universidad, forma parte de una élite que lo distancia del perfil del político profesional. Autor de seis obras de jurisprudencia, es el hombre que el presidente Carlos Salinas de Gortari escogió con lupa en noviembre para dirigir el ministerio público y la policía.Pregunta. ¿Qué está pasando en México?

Respuesta. Vivimos una situación inusual de violencia, que espero sea transitoria. Sin embargo, ha habido gran capacidad institucional de respuesta. Me refiero al caso de Chiapas, donde 10 días después del suceso fue posible consolidar una condición de paz. El esfuerzo y la imaginación política desplegados dejan claro que México valora elevadamente la paz.

P. Hay gente que no se explica aún cómo el Estado ha podido negociar con encapuchados.

R. Si lo que se quiere saber es si esto vulnera el Estado de derecho, puedo decir que no. Lo de negociar o no con encapuchados es una forma de respuesta. Lo importante es evitar el sacrificio de vidas humanas.

P. Chiapas, la ola de secuestros contra empresarios y el asesinato de Luis Donaldo Colosio parece que tienen un objetivo común: desestabilizar el país.

R. No creo que haya coincidencias o convergencias entre estos fenómenos. Pero ese posible efecto desestabilizador que podrían haber generado no ha sido posible, porque México tiene instituciones sólidas.

P. Asesinan a Colosio y aparecen varios ex policías implicados. Lo mismo ocurre con los secuestros de los empresarios Alfredo Harp y Ángel Losada: la gente sospecha que detrás está la mafia policial.

R. En México pasa con la policía lo que en muchos países del mundo: que hay problemas serios de corrupción. Durante el gobierno del presidente Salinas se ha combatido esta corrupción, con éxito en la mayoría de los casos. Por. primera vez, el Estado da respuesta a este problema: hay más control sobre las instituciones, el policía recibe mejor formación y mayor estímulo, y se fortalece la conciencia ciudadana sobre los derechos humanos. Es un largo camino, pero ya, por lo menos, hemos empezado a andar.

P. Un importante sector de la ciudadanía está convencido de que el asesinato de Colosio no será jamás esclarecido.

R. No comparto esa tesis. Entre otras razones, porque el homicida material está perfectamente identificado y sujeto a proceso. Además, creo que se trabaja con mucha seriedad en el caso, especialmente por parte del subprocurador especial, Miguel Montes, para identificar las circunstancias de este crimen.

P. ¿Usted es de los que piensan que Colosio fue víctima de una conjura?

R. Yo no tengo esa impresión. El hecho de que haya habido una asociación delictuosa entre las cuatro personas que están sujetas a proceso no es una característica típica de una conjura. Cuando se habla de conjura se, habla de un propósito ulterior y de más amplio interés que el de privar la vida de una persona. Estoy seguro de que los avances en la investigación pondrán en la dimensión real el problema.

P. ¿Quiere decir que no hubo un autor intelectual?

R. Bueno, eso tendrá que acreditarse. Yo no quiero, en este momento, ni afirmar ni negar ninguna hipótesis. Sería prematuro que los funcionarios de esta procuraduría hiciéramos ya una afirmación categórica descartando o aceptando cualquier opción. Lo más ortodoxo es mantener abiertas todas las hipótesis hasta determinar cuál de ellas, en base a la solidez de las pruebas, se ajusta más a los hechos.

P. Harp y Losada figuraban en una lista hallada a ETA en un buzón que tenía en Nicaragua.

R. Efectivamente.

P. ¿Está manejando este dato la policía mexicana?

R. Que yo sepa, se tuvo en cuenta en su día para que las personas que aparecían en la lista tomaran medidas,. pero, por lo que se ve, no hubo éxito en estos dos casos. Las familias de los secuestrados han pedido a la. policía que no intervenga para no entorpecer el proceso de recuperación con vida de los secuestrados. Por lo demás, desconozco los elementos que se barajan sobre estos secuestros, porque se trata de una investigación que corresponde a la Procuraduría del Distrito Federal.

P. México era hasta hace muy poco tierra de asilo para ETA. Aquí residen más de cien personas vinculadas a la banda.

R. En México hay un número que desconozco de personas que han militado en ETA, pero hasta ahora ninguna aparece vinculada a problemas de orden público. No hay elementos que nos lleven al convencimiento de que han mantenido alguna actividad delictiva aquí.