De la Torre niega haber usado el nombre del PSOE para cobrar comisiones

José Ramón de la Torre Escandón, de 49 años, negó ayer haber hecho "gala de influencias políticas para el favorecimiento de los contratos ni para ningún otro fin" según consta en su declaración ante la juez de Instrucción número 34 de Madrid, Beatriz González, en relación con la querella presentada por la empresa orensana Oteca. La constructora afirma haber pagado 105 millones de pesetas al ex militante socialista para que le consiguiera contratos de obras por 2.000 millones de pesetas al año, que nunca se llegaron a materializar, por lo que le acusa de estafa, apropiación indebida y falsedad.

De la Torre, que ha sido involucrado en el cobro de comisiones multimillonarias utilizando fraudulentamente el nombre del PSOE, dijo ayer ante la juez que llegó a ofrecer al administrador de Oteca, José Rodríguez Álvarez, contratos por obras, cuya ejecución ascendió a 4.000 millones de pesetas. Representantes de la empresa orensana aseguran, sin embargo, que el contrato estipulaba que debía conseguir contratos por 2.000 millones de pesetas anuales, pero que no consiguió ninguno.Ante el incumplimiento del contrato y ante la imposibilidad de contactar con el ex militante del PSOE -que no se ponía al teléfono-, Oteca llegó a requerir notarialmente a De la Torre. Durante ese tiempo, y después de cobrar 105 millones de pesetas por el adelanto de las comisiones, De la Torre "no dio cuenta de ninguna gestión encaminada al cumplimiento del contrato" según consta en la querella presentada por Oteca.

Anticipos

De la Torre admitió ayer haber recibido 45 millones en cheques, en lugar de los 50 que figuran en la querella de Oteca, como anticipo de las "comisiones por promociones qué se estaban presentando para ser ultimadas" con un gabinete denominado Inareo.El ex militante socialista añadió ante la juez que una parte importante de esos 45 millones fueron entregados al citado despacho, aunque no la totalidad.

Respecto a la letra de 50 millones que Oteca le entregó, De la Torre afirmó que la había utilizado como garantía de un crédito solicitado al Banco Urquijo por 25 millones y que fueron a cuenta de las gestiones que esta ba realizando con un cliente de Ciempozuelos (Madrid) a través de Inarco. Se trataba, dijo, de una promoción de unas 70 viviendas. Los otros 25 millones fueron depositados en una cuenta de Gitesa, sociedad de la que es administrador único y de la que posee el 50% del capital. Otra empresa denominada Batres, propiedad de Juana Torresano, esposa de De la Torre, es titular del 50% restante.

La querella presentada por Oteca no es la única acción penal no es la única acción penal con la que se debe enfrentar De la Torre. El dirigente socialista Txiki Benegas denunció al Fiscal General del Estado el pasado 7 de marzo las actividades ilegales del ex militante socialista, quien su vez remitió la denuncia a la fiscalía de Madrid.

Las comisiones de Gitesa son sólo la punta del iceberg de una red de sociedades que manejaba de la Torre desde hace años.