No todo va tan bien

Todo va bien podía haberse llamado el jueves Toda va mal. Rubio, González, Roldán y De la Concha ocuparon la mañana de Antena 3. La actualidad informativa ganó al magazine diario. El consultorio sexual y el número del bombo no se echaron de menos. Las espectadoras ardían de curiosidad por saber los últimos acontecimientos políticos.La Asociación Cultural de Mujeres El Clavel de Tembleque (Toledo) fue la elegida para asistir al programa Todo va bien, de Pepe Navarro, el pasado jueves 5 de mayo. Las señoras de El Clavel ya habían presenciado otros programas. Son veteranas. María Teresa Campos, Consuelo Berlanga y José Coronado eran las celebridades televisivas conocidas por las mujeres de Tembleque. Aplausos para Consuelo Berlanga, críticas para José Coronado. "Es muy estirado, ni siquiera nos saludó", opinaba una, y las otras la coreaban. Y es que al público le gusta que le cuiden.

Pepe Navarro lo sabe. Nada más entrar al plató, a las 11.10, saluda a las invitadas, que aplauden entusiasmadas. Diálogo típico: "¿De dónde vienen?". La parte izquierda, más participativa, contesta a una: "De Tembleque"; ignorancia geográfica del presentador: "¿Qué es ... ?". "Toleeedo", contestan. Bromas sobre las luces, que se caen o que se dejan de caer. Aplausos. Comentarios: "Es igual de recachondo de lo que parece en la tele".

Vestidas y pelucadas para la ocasión, las señoras de Tembleque se disponen a ver, en vivo y en directo, las dos horas y tres cuartos que dura el magazine.

Las que repiten programa se han situado estratégicamente en el lado izquierdo, y con razón. Las invitadas del margen derecho no ven la pantalla grande por la que se ven las imágenes. Dos cámaras y el personal que corretea por el estudio no permiten la visión. "Ya me decía mi amiga, que ya ha venido, que fuera para ese lado", cuenta Gregoria, mientras intenta ver un squetch sobre Hacienda.

Como la actualidad apremiaba, la tertulia de primera hora del programa versó sobre la situación política. Los tertulianos comentaron las últimas corruptelas. Las amas de casa de Tembleque afirmaban con la cabeza cada vez que un tertuliano pedía la dimisión de Felipe González o aseguraba que en España no iba a suceder nada tras la rueda de prensa de González. Ni que decir tiene que el espacio publicitario fue aprovechado para comentar la jugada. "Hay que estar preparada para cualquier cosa", "el más honrado fue Suárez", "aquí todo el mundo chupa del bote" y un larga lista de comentarios ad hoc.

Los cotilleos de la periodista María Eugenia Yagüe sobre la la capacidad "envidiable" de gastar dinero de la mujer de Manuel de la Concha despertaron la hilaridad del público. "Así cualquiera se gasta sumas de seis cifras", "si se tiene, es fácil gastarlas", comentaban las unas con las otras.

Era tan atípico el programa que hasta los actores, que a veces interrumpen a Navarro con sus bromas, ya maquillados y vestidos para la ocasión, leían el periódico, fumaban sin parar, descansaban sobre la tarima del plató y trajinaban al perro que paseaba por allí. Una característica del público es la obediencia al realizador. También en este aspecto ganó la margen izquierda. Reír y guardar silencio son las virtudes por excelencia del público.

El programa gustó a las de Tembleque, o por lo menos, se hizo corto, que ya es bastante. Cuando se despidió el presentador la pregunta general fue "¿Ya se ha terminado?". Navarro se despidió del público, que ya se había dado cuenta que no había sido enfocado ni una sola vez durante las dos horas y tres cuartos de emisión, y se fue como había entrado, como una exhalación.

Un último consejo si piensa asistir como público al estudio 3 de Antena 3: vaya abrigado, porque el aire acondicionado le puede jugar una mala pasada.