Cinco 'boixos nois" son condenados a 75 años de cartel por la muerte de un seguidor del Español

La Audiencia de Barcelona ha condenado a 75 años de cárcel a cinco miembros de los boixos nois por la muerte de un seguidordel Español y por las lesiones causadas a otro el 13 de enero de 1991. Los hinchas radicales del Barca actuaron movidos por el ánimo de agredir a sus oponentes, perono de causar la muerte, motivo por el que la Audiencia ha rebajado el cargo de asesinato, formulado por el fiscal y las acusaciones, por el de homicidio y lesiones.

La sentencia rechaza que existiera alevosía y premeditación en la actuación de los procesados. "Decidieron, de común acuerdo, salir en busca de posibles miembros pertenecientes a las Brigadas Blanquiazules [grupo radical de aficionados del Español con la finalidad de agredirles y provocarles violencia fisica", sostiene el fallo.Con esa intención, los cinco boixos nois decidieron dirigirse con el vehículo de uno de ellos a las inmediaciones de Sarrià, donde el Español recibió al Sporting. "Cuando estaban en la zona, observaron a dos personas, el francés Frédéric-François Roquier y José María Arboleas -y un tercero que portaba una bufanda del Español-, y decidieron atacarlas físicamente", cuenta la sentencia. "¡Para, para, vamos a por ellos!" fue la orden que dio José Antonio Romero Ors, cuya condena es la más alta, 20 años.

Bajaron del coche y una de las víctimas, José María Arboleas, huyó. La otra, Rouquier, no reaccionó. De Romero Ors dice la sentencia que portaba un machete y que cuando alcanzó a Rouquier "le lanzó un primer golpe con la intención de matar". La cuchillada tropezó con la mano del joven, pero otras dos le alcanzaron zonas vitales y falleció. En la agresión de Rouquier participó, junto con Romero, Francisco Javier Calaf, condenado a 17 años.

Los otros tres procesados -Jorge Esteve Sánchez, condenado a 17 años; Lluís Calafell López, a 6, y David Ventura Aparicio, a 15- persiguieron a Arboleas. Éste fue alcanzado y recibió dos puñaladas de la navaja que empuñaba Jorge Estévez y golpes de los otros dos. La agresión de Arboleas terminó cuando un guardia de seguridad del hotel Melià -donde intentó refugiarse el herido- acudió para ver qué ocurría. Todos huyeron en el coche y al día siguiente fueron detenidos.

El tribunal, que ha señalado una indemnización de 15 millones de pesetas para la familia de Rouquier, estima una atenuante en el caso de Calafell porque cuando ocurrieron los hechos era menor de edad. En el caso de Romero Ors, el tribunal también aplica una atenuante por trastorno mental transitorio y otra atenuante, de enajenación mental, para Ventura.