Cónclave del Banesto
Los dos primeros días de la Vuelta fueron aprovechados por el equipo Banesto para efectuar una especie de ejercicios espirituales técnicos. Los cuatro directores del conjunto coincidieron en carrera. José Miguel Echávarri, Javier Mínguez, Eusebio Unzúe y José Luis López Cerrón se contaron lo que habían hecho los distintos corredores durante el primer tercio de la temporada y continuaron programando el resto. Son los problemas que tiene una escuadra tan poderosa, dispuesta a estar presente en todo el calendario internacional. "No habíamos tenido aún oportunidad de juntarnos los cuatro", dijo Unzue, que ayer se marchó con Miguel Induráin hasta Burdeos, donde presenciaron a pie de velódromo un nuevo intento de récord de la hora del ex plusmarquista escocés Graemme Obree. Después, el corredor navarro y el director marcharán hasta Suiza con otros cuantos corredores. Allí disputarán el domingo el Gran Premio de Gippingen y, a partir del martes, la Vuelta a Romandía como preparación para el Giro, que comienza el 22 de mayo. La Vuelta a Romandía es la cita habitual de los aspirantes al Giro, razón por la que se trata de una carrera que suele contar con una buena participación internacional.
