Hecho insólito

A comienzos de marzo, un general de división en la reserva razonaba en este mismo periódico, bajo el título Soldados maltratados, sobre la COE de Palma de Mallorca. Dos semanas después y en carta al director, arremetió contra él otro general de división en activo, por verse obligado a salir en defensa de ciertos oficiales y suboficiales que creyó menospreciados por aquél.Sorprendió el bravo comportamiento del segundo en defensa de sus subordinados, a los que, por cierto, no defiende en público y con el mismo ardor del no reconocimiento de su antigüedad y correspondientes ascensos (escala auxiliar); de la amenaza de que les quiten la casa militar, que con todo derecho ocupan al cambiar de destino, situación o llegar a la reserva; del retraso en la ampliación de la Orden de San Hermenegildo (suboficiales), al fin reglamentada sin el mínimo beneficio económico que conllevaba; de nuestra anticonstitucional relegación a ciudadanos de segunda, etcétera.

El primero, allá él, se inclinaba por los suboficiales de antes y por los tenientes de carrera, pues decía que los oficiales subalternos de otras procedencias no siempre están tan preparados como ellos. El segundo debió leer "de academia" en lu-

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gar de "de carrera", y olvidó defender a aquellos a los que, precisamente por esos días, y a resultas de ése y otros sucesos, se les quitó el mando efectivo obligándoles a cumplir sus servicios como adjuntos de uno de aquéllos.

Para mayor contraste, el segundo general publicó días antes, y en el Diario de Navarra (allí ejerce su mando), un artículo sobre la creación de la Asociación de Veteranos de la Milicia Universitaria de Navarra, que dice de oficiales de complemento, erróneamente, pues lo fueron hasta el día de su ya lejano licenciamiento definitivo. En él canta sus virtudes militares, pero silencia que ni la España de entonces ni la actual consienten su a todas luces necesaria posibilidad de volver voluntariamente a filas y vestir el uniforme. Añade que esos oficiales (que no lo son, pues no les dejan serlo) forman una Asociación Europea de Oficiales de Complemento.

No, mi general, lo que existe, a nivel OTAN, es la Confederación Interaliada de Oficiales de Reserva (CIOR), que en la Alianza son los profesionales que por el motivo que fuere han dejado la carrera y esos otros oficiales que allí sí lo son.

Lo que tan ingenuamente aplaude es la sucia creación, por el Ministerio de Defensa, de una denominada Federación de Organizaciones de Reserva de España (FORE), que, en contra de lo dispuesto por la CIOR, sólo admite a las integradas por los que fueron de las milicias universitarias, dejando fuera al oficial de carrera español y, de paso, al oficial de reserva, que Defensa se resiste a crear. Amplio y vital tema que mi general desconoce y para el que me ofrezco.- Coronel de caballería DEM (reserva). Presidente de la Hermandad del Personal Militar.