El organizador de la carrera popular debe 14 millones a dos asociaciones

Los promotores del Maratón de Cataluña y del Maratón Popular de Madrid advirtieron al Ayuntamiento de la capital, ocho días antes de la carrera por el récord, que Eduardo Garzón, organizador de la prueba, era un moroso y les adeudaba 14 millones de pesetas. Garzón consiguió patrocinio para dos maratones a través de su empresa Intercarrera, pero no pagó a los organizadores el dinero convenido.El PP conoció esta circunstancia, pero dejó manos libres al organizador de la carrera celebrada el pasado domingo. "Nos llamaron amablemente y nos avisaron de estas deudas. Pero no podíamos hacer nada. La mayoría de los dorsales ya habían sido repartidos y, además, la prueba había sido organizada por la misma persona que en la edición pasada, y entonces salió bien", explica el concejal de Deportes, José Gabriel Astudillo.

Adolfo Torruella, presidente de la asociación deportiva Maratón de Cataluña, que organiza desde hace 17 años esta carrera, lleva más de seis meses intentando cobrar parte del dinero que la aseguradora Santa Lucía pagó a Intercarrera para patrocinar el maratón. Ese dinero nunca llegó a los organizadores. "Nos pagaron un primer plazo, pero nos devolvieron la segunda letra. En diciembre firmaron un documento en el que reconocen una deuda de 7.417.897 pesetas", explica Torruella. Garzón reconoció ayer estas deudas, aunque recalcó que correspondían a la empresa Intercarrera, en la que participaba con otro socio, y no a su actual negocio, Aros.

El verano de 1993 arruinó a Garzón. La Concejalía de Cultura le cedió el parque de la Cuña Verde, de Latina, a cambio de que su empresa garantizase actividades culturales todos los días. Aquella inversión sólo ocasionó pérdidas. El concejal de Latina, Sigfrido Herráez, recuerda: "Acabaron un mes antes del plazo establecido en la concesión porque no les fue demasiado bien. Abandonaron las instalaciones destrozando tres árboles y cinco farolas. Les requerimos para que pagaran los desperfectos, pero no contestaron".

Acta de un récord

Guinness España recibió ayer el acta notarial donde la empresa declara el número de participantes de la prueba celebrada el pasado domingo en la Castellana, para intentar así demostrar que se ha batido el récord del mundo, informa Luis Fernando Durán. Cada una de las personas encargadas de hacer el recuento de las calles firma una declaración jurada donde certifica que contó un número determinado de personas. Sin embargo, en la notaría de Rafael Vallejo, encargada de levantar el acta oficial, no se ha comprobado la veracidad de estos datos. Antonio Bastante, miembro de la notaría, aclaró que tan sólo se han limitado a elaborar la escritura: "Nosotros no podemos comprobar esos datos que se han encargado, y tan sólo nos hacemos cargo de levantar el acta de lo que ellos dicen".