Croatas, y musulmanes acuerdan formar un Ejército común bosnio
Los comandantes militares de los musulmanes y croatas de Bosnia-Herzegovina firmaron ayer en Split, en presencia del general estadounidense retirado John Galvin, un acuerdo sobre el futuro del Ejército común de la federación musulmano-croata, informaron medios oficiales croatas. Mientras, las delegaciones de las dos comunidades que negocian en Viena anunciaron anoche que esperaban llegar hoy mismo a un acuerdo definitivo sobre la constitución de dicha federación.
Los negociadores de Viena reconocieron, sin embargo, que un acuerdo global en la región no podrá ser alcanzado mientras no se asocia, de una u otra forma, a los serbios a la Federación. El enviado especial ruso Vitaly Churkin expresó ayer la misma idea durante la visita que efectuó a Zagreb, aunque subrayó que tal partipación serbia al futuro acuerdo "no parece estar fuera de cuestión; hay posibilidades interesantes y las estamos estudiando", añadió.Mientras tanto, en Split, el tono era al optimismo. "Se trata de un acuerdo histórico", declaró Galvin, ex comandante en jefe de la OTAN, que actuó de mediador en las negociaciones. Añadió que el respeto de la tregua entre musulmanes y croatas del pasado 25 de febrero sobrepasa las expectativas más optimistas.
Sin embargo, los croatas denunciaron que un proyectil impactó en el centro de Mostar ayer. La parte Este de la capital de la Herzegovina, bajo control croata, fue puesta bajo estado de alerta. No se sabe si el proyectil procedía de posiciones serbias o musulmanas, y los cascos azules españoles desplegados en la zona no pudieron verificar la denuncia de los croatas.
El mando del IV Cuerpo del Ejército bosnio musulmán protestó ayer, por su parte, ante el batallón español que vigila la tregua por lo que considera "reiteradas violaciones croatas del alto el fuego". A pesar de todo, el acuerdo firmado ayer en Split, tras dos días de negociaciones entre el general bosnio-musulmán Rasim Delic y el bosnio-croata Ante Roso, comienza a cerrar la parte militar de las negociaciones que también se está a punto de concluir en Viena en el plano político.
En la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, mientras tanto, Butros-Gali volvió a hacer hincapié ayer en la necesidad de que 12.000 nuevos cascos azules sean desplegados en Bosnia para evitar que se malogre el alto el fuego en Sarajevo y en el centro de Bosnia. España decidió el viernes enviar 200 cascos azules más a Bosnia. El Reino Unido anunció que reforzará su contingente con 900 hombres y Francia con otros 600.
Imperio otomano
Los serbios de Bosnia advirtieron ayer a la ONU que el posible despliegue de cascos azules turcos en Bosnia supondrá una escalada, de la guerra. Momcilo Krajisnik, uno de los líderes de la autoproclamada República Serbia de Bosnia, declaró que los efectivos turcos eran inaceptables a causa de la ocupación turca de Bosnia durante los 500 años del imperio otomano. También los musulmanes bosnios han mostrado sus reticencias ante los cascos azules aportados por la Federación de Rusia, ya que la consideran una potencia tradicionalmente aliada de Serbia.
Pero Butros-Gali aseguró el viernes que si no había respuesta a su urgente demanda de 12.000 cascos azules se vería obligado a aceptar los 1.000 soldados ofrecidos por el Gobierno de Ankara.
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