_
_
_
_

Sólo la mitad de los fondos reservados de Interior se usan en luchar contra el terrorismo y el narcotráfico

Si todo el dinero que hay para pagar a confidentes se hubiera empleado en eso, hace años que se habría acabado con ETA, afirma un comisario que años atrás desempeñó un alto cargo en Interior. Él y otros jefes policiales estiman que la mitad de los 600 millones de los fondos reservados de la Secretaría de Estado para la Seguridad se han empleado en sobresueldos, mantener a arrepentidos e incluso para pagar a algún sindicato policial. El PP cree que el presidente del Gobierno es responsable de la mala utilización de estos fondos. Según Eligio, Hernández, fiscal general del Estado, los ministros que manejan éste dinero han obrado "adecuadamente", "salvo que haya una prueba contundente que resulte de un procedimiento judicial".

Más información
El Congreso no podrá controlar el dinero negro del Estado porque ofícialmente no hay facturas

La llegada de Rafael Vera a la Secretaría de Estado para la Seguridad, en noviembre de 1986, trajo un cambio en el uso de los fondos reservados. Hasta entonces, Interior entregaba parte del dinero a la Policía y parte a la Guardia Civil, cuyas direcciones generales se encargaban de gestionarlo.A partir de su acceso a la Secretaría de Estado, Vera asumió el control absoluto de este dinero, lo que le ocasionó más de un encontronazo con José María Rodríguez Colorado, entonces director general de la Policía, quien pensaba que era a él a quien le correspondía gestionar su partida.

El ex director general de la Guardia Civil, Luis Roldán, también modificó radicalmente el control de los fondos reservados cuando llegó a su puesto. Hasta entonces, los jefes militares de ese cuerpo entregaban anualmente determinadas cantidades a cada uno de los servicios. El responsable de la, investigación se limitaba a pedir autorización a su jefe para compensar al chivato con dinero.

Pero este sistema, que según fuentes de la Dirección General de la Guardia Civil, permitía controlar el dinero, se desechó cuando Roldán asumió la dirección del cuerpo. Fue él mismo quien supervisaba todos los fondos.

Durante el mandato de Vera, no sólo han percibido un sobresueldo los 28 altos cargos cuya comparecencia parlamentaria ha pedido el PP, sino que todo funcionario destinado en esa secretaría de Estado recibía un complemento. En el caso de los policías y guardias civiles, incluso los dedicados a tareas burocráticas, eran 50.000 pesetas. Esa cifra se acerca ahora a las 100.000 pesetas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Lealtades y sobresueldos

Vera consiguió muchas lealtades con el presunto reparto de sobresueldos, dicen medios policiales, que están "convencidos" de que los receptores de estas pagas extras han firmado recibos. "Es lógico que llevara una contabilidad interna para tener las espaldas cubiertas ante su ministro", agregan.

El sistema ha generado también bastantes corruptelas entre los policías y guardias civiles dedicados a la lucha antiterrorista. "En más de una ocasión se ha pagado mucho dinero con la excusa de sobornar a un confidente que iba a facilitar la detención de un comando, cuando en realidad su captura se había conseguido sin dar un duro a nadie: simplemente con el trabajo ordinario", señala con desolación un mando policial que pide el anonimato. "Ha habido fondos reservados que se han perdido a mitad de camino", añade.

Un jefe de la brigada antidrogas asegura que en su unidad no se utilizan los fondos reservados tanto como pudiera pensarse. Según él, la mayoría de las investigaciones se hacen sin que medien pagos a confidentes, y, cuando hay que recurrir a esté procedimiento, la cantidad más elevada que se ha pagado han sido de dos millones. Otros funcionarios destinados en unidades de lucha contra la delincuencia común afirman que "Interior siempre es muy restrictivo con los fondos reservados para confidentes de este tipo de operaciones". Varios comisarios señalan que Interior ha llegado a usar los fondos reservados para acallar a dirigentes de algún sindicato policial, consiguiendo que cesaran en sus críticas o en sus reivindicaciones. Estas fuentes rehusaron precisar qué sindicato recibió este dinero.

Los fondos reservados sirven par a pagar mensualmente cerca de 200.000 pesetas al arrepentido Ricardo Portabales y a otros que se han prestado a colaborar con la justicia en la Operación Mago y en otras pesquisas.

Este dinero sin control se ha empleado también, según medios policiales, en remunerar a agentes franceses a cambio de que dieran informaciones, al margen de su estructura oficial, sobre los movimientos de los etarras en el País Vasco francés.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_