Garzon y Pérez Mariño exigen una investigacion sobre el uso privado de los fondos reservados

Los dos diputados independientes del Grupo Socialista, los magistrados en excedencia Baltasar Garzón y Ventura Pérez Mariño, coincidieron ayer en reclamar una investigación a fondo sobre el presunto desvío a sobresueldos de partidas de los fondos reservados del Ministerio del Interior. Garzón, delegado del Gobierno en el Plan Nacional sobre Drogas, adscrito a Interior, adelantó su convencimiento de que si se ha producido tal uso existirá un delito. El fiscal general del Estado, Eligio Hernández, declaró que "estudia" la posibilidad de abrir diligencias informativas.

La información sobre el cobro de sobresueldos y gratificaciones fue suministrada a El Mundo personalmente por el ex director de la Guardia Civil, Luis Roldán, según aseguró ayer Onda Cero en su espacio Confidencial. Garzón, que ya fracasó en su intento de conseguir explicaciones sobre la presunta utilización de fondos reservados para financiar acciones de los GAL, cuando era magistrado de la Audiencia Nacional, reclamó ayer un control parlamentario de esas partidas.El diputado añadió que también debe producirse una investigación judicial acerca de posibles usos fraudulentos: "Si se ha obtenido un lucro con cargo a fondos públicos, eso tiene un nombre en el Código Penal".

El también diputado socialista y magistrado en excedencia Ventura Pérez Mariño considera "una obligación política y moral" que Interior ordene una investigación interna. Para Pérez Mariño, estas partidas pueden ser secretas en función de su finalidad exclusiva de cubrir objetivos cuya divulgación no es conveniente, pero en ningún caso se pueden usar para fines distintos de los previstos.

El fiscal general del Estado, Eligio Hemández, se mostró escurridizo sobre la conveniencia de abrir una investigación. En una entrevista en Onda Cero dijo que estudia la apertura de diligencias informativas, pero explico que existen dificultades legales y que la jurisprudencia apunta a la imposibilidad de investigar tales partidas.

El presidente del Tribunal Constitucional, Miguel Rodríguez-Piñero, opinó en un sentido aparentemente distinto. "No creo que haya obstáculos jurídicos para una aclaración de las cosas que tengan que ser aclaradas", declaró en Barcelona. Rodríguez Piñero agregó que el control parlamentario supone "un marco suficiente para que, sin excesos, sin desconocer lo que son las materias que deben ser reservadas, poder averiguar su uso indebido".

El delegado del Gobierno en el País Vasco, José Antonio Aguiriano, ha anunciado la presentación de "una querella o querellas contra el diario El Mundo por calumnias", al haber sido citado como uno de los responsables de Interior que cobraban sobresueldos procedentes de los fondos reservados. Aguiriano, indignado, negó rotundamente que haya recibido "ni una sola peseta", y adelantó que dimitirá si alguien demuestra lo contrario, informa desde Vitoria .

Otro desmentido llegó del director general de la Policía, Carlos Conde Duque, que aseguró a la COPE: "No he utilizado ni una peseta de los fondos reservados para fines personales". Conde Duque justificó la necesidad de este tipo de partidas y agregó: "Yo no estoy bajo sospecha. Estoy verdaderamente fastidiado, porque en estas situaciones acaba bajo sospecha mucha gente".

Por parte del PP, el secretario general, Francisco Álvarez Cascos dijo que el uso particular de estas partidas forma parte "de una actitud de afrontar las responsabilidades públicas como si España y la Administración fueran un cortijo". Esas partidas, agregó, "no se pueden convertir en fondos privados para repartirse la tarta, para meter la mano en la caja del pan y llevárselo al bolsillo". Y concluyó: "Estoy seguro de que el señor [Felipe] González conoce perfectamente el destino que han tenido los fondos reservados del Ministerio del Interior en estos años".

El propio Aznar calificó ayer en Cádiz de "absolutamente impresentable" el uso que el Gobierno ha hecho de los fondos reservados que, a su juicio, demuestra "el nivel de descomposición" del país".

Por su parte, el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, dijo ayer que los fondos reservados "no son ilegales" aunque su uso si puede ser "imnoral, amoral o egoísta" y se mostró partidario "de algún tipo" de control. En su opinión, si ha habido "sobres" para lucro personal "nunca se podrá demostrar, porque eso está al margen de cualquier pesquisa", informa Efe.