Dos mujeres y una niña mueren aplastadas en León al desplomarse un edificio de cinco plantas

Dos mujeres y una niña de cinco anos murieron anoche aplastadas al derrumbarse un edificio de cinco plantas situado en el número 63 de la calle de Mariano Andrésde León. El inmueble se vino abajo sobre las ocho de la tarde, atrapando entre los escombros a María Teresa Fernández García, de 33 años; su sobrina Ariadna María Robles Fernández, de cinco años, y MaríaConcepción Garcia, de 92 años. Varios vecinos indicaron anoche que habían visto grietas en las paredes y, aunque no les dieron importancia, habían pensado en avisar al dueño del edificio, para repararlas.

La tragedia ocurrió poco antes de la tarde y los cuerpos de dos de las fallecidas no fueron rescatados hasta las once de la noche. María Teresa Fernández García y Ariadna María Robles Fernández -que se encontraban en un video club de la planta baja propiedad de un familiar- fueron rescatadas sin vida de los restos del edificio, mientras que María Concepción García -que vivía en el piso primero izquierda- fue rescatada con vida, aunque falleció posteriormente en un hospital.Otras dos personas, un minusválido que vivía en el primero y otra mujer de unos 60 anos, resultaron heridas y fueron trasladadas al complejo hospitalario del Insalud. Según fuentes de la Policía Local, el estado de los tres heridos no revestía gravedad. En las tareas de rescate y desescombro participaron bomberos, Cruz Roja, Policía Loca y miembros del Ejército.

La fachada, en pie

El siniestro produjo el hundimiento interior del edificio, aunque la fachada permaneció en pie. El inmueble fue construido hace unos 50 años, aunque en un principio sólo se levantaron las tres primeras plantas y posteriormente las otras dos, según aseguró ayer Julio Gonzalo Blanco, de 27 años, uno de los vecinos del tercer piso, que anoche, visiblemente nervioso, explicaba como salvó su vida por apenas unos minutos.

"A la hora de comer ya había unas grietas enormes en el techoen las que cabía una mano. Lo comentamos con los del segundo para ir a ver al dueño del piso cuanto antes. Yo salí de casa sobre las siete y despúes vino el desastre",manifestaba Blanco.

La totalidad del edificio se encontraba en alquiler, y sólo una plantano estaba habitada,según varios tesetimonios. En opinión de Blanco, el siniestro, cuyo origen se desconocía anoche, "se veía venir. No eran normales esas grietas". Blanco vivía en el tercer piso con su mujer e hija y el suegro, quienes en el momento del hundimiento no se hallaban en casa.

Los cadáveres de la mujer y la niña se encontraban bajo una gran cantidad de escombros, al fondo del local del videoclub Las Ventas, en lo que con toda probabilidad era el mostrador. La manzana en la que se halla la casa siniestrada permanecía acordonada por miembros del Ejército a la una de la madrugada, mientras se continuaba con la extracción de escombros y la revisión de los edificios colindantes.

El barrio de Las Ventas está habitado por familias de condición humilde. La Policía Local desconocía anoche las causas del derrumbamiento del edificio y junto con los bomberos y demás personal de obras del Ayuntamiento revisaban los inmuebles adyacentes para conocer si se habían producido grietas en ellos como resultado de la catástrofe. Se espera que hoy sábado el Ayuntamiento ofrezca más detalles sobre las causas del derrumbe, aunque se conoce que el edificio no estaba declarado en ruina.

Durante las tareas de rescate se produjeron momentos de gran tensión, entre los vecinos del barrio. Muchos de ellos, agolpados ante el acordonamiento de los miembros del Regimiento Almansa, esperaron en pie varias horas a que fueran sacados al exterior los cuerpos de la mujer y su hija.