Los democristianos alemanes se aferran a KohI en un año plagado de elecciones

El congreso de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) ha revalidado al canciller Helmut Koffl como su líder indiscutible y ha cerrado filas en torno a su persona como única posibilidad de triunfo en las 18 elecciones que se celebrarán este año. Helmut Kohl, que clausuró ayer el congreso en Hamburgo, prometió a sus seguidores, utilizando una metáfora hípica, que estaban apostando "por el ganador, no por el colocado".Para reforzar la idea de unidad, los 1.000 delegados de la CDU aprobaron, con una sola abstención, el nuevo programa fundamental de la Democracia Cristiana titulado Libertad en responsabilidad, con el que el partido pretende establecer las directrices de la política conservadora para la próxima década.

En su despedida a los asistentes al congreso, Helmut Kohl no perdió la oportunidad de ensayar el tono electoral. "Los partidos de la Unión estamos decididos a luchar por cada voto", aseguró el canciller, quien insistió en que "no se trata de mantenerse en el poder, sino del convencimiento de estar en la senda correcta".

Las elecciones de Baja Sajonia, que se celebrarán el 13 de marzo, constituirán la primera prueba de este año para los cristianodemócratas, que llegan a ellas después de 12 años en el Gobierno y con los sondeos de opinión en contra.