Arianespace reemprenderá el lanzamiento de cohetes en mayo
Arianespace, la empresa europea, con participación española, que comercializa el cohete Ariane, reemprenderá los lanzamiento a finales de mayo. El presidente y director general, Charles Bigot, lo comunicó ayer en el transcurso de una conferencia de prensa para explicar las conclusiones a las que ha llegado la comisión encargada de la investigación del accidente que causó la pérdida el pasado 24 de enero de un cohete Ariane a los pocos segundos de su lanzamiento. Este accidente quebró la racha de 26 lanzamientos sucesivos con éxito.El vuelo 63 se interrumpió después de que hubiesen funcionado sin novedad las dos primeras fases del cohete. Fue tras la puesta en marcha del motor de la tercera fase cuando se produjo el incidente. Según la comisión, "el paro del motor se debió a una refrigeración insuficiente de un rodamiento combinado con otros factores que supusieron una sobrecarga para dicho rodamiento".
Acumulación de humedad
Según Jean Paul Herteman, de la SNECMA (empresa estatal que fabrica motores), presidente de la comisión de investigación, el "origen probable de la refrigeración insuficiente se debe a una acumulación imprevista de humedad que pudo obturar los filtros. No hay duda de que se produjo un desequilibrio térmico, que el calentamiento fue de 10 'grados Kelvin por segundo, es decir, cien veces más rápido de lo normal, y que eso propició una dilatación importante del eje".
"Es importante subrayar que la comisión sólo ha tardado tres semanas en elaborar su informe", precisó Bigot, "de manera que el vuelo 64 no tendrá que retrasarse más allá de los tres meses. Antes de que acabe el mes de mayo volveremos a poner un cohete en el espacio y se mantiene el objetivo de 30 lanzamientos durante los próximos 3 años. El retraso que supone esa pausa esperamos recuperarlo realizando un lanzamiento cada tres semanas en lo que reste de l994".
Al mismo tiempo que Herteman exponía las soluciones adoptadas para evitar que se repitiese una situación parecida, Bigot ratificaba la fiabilidad del Ariane y la confianza del mercado: "Ninguno de nuestros clientes se ha retirado. Es más, el Gobierno británico acaba de confirmarnos que desea contratar nuestros servicios para poner en órbita un nuevo satélite. El accidente del 24 de enero pasado nos costará entre 50 y 100 millones de francos (entre 1.200 y 2.400 millones de pesetas) suplementarios debido a que hay que desmontar el tercer piso, transportarlo y que los viajes de la Guyana a París tendrán de hacerse en avión en vez de en barco para evitar aumentar los retrasos. Pero es un, gasto que no pagarán nuestros clientes, que asumimos entre Arianespace y los industriales implicados en el proyecto".
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