EE UU sancionara a Japón si en 30 días no abre sus mercados
La decisión de Estados Unidos de imponer sanciones económicas a Japón en el plazo de 30 días puede conducir a una guerra comercial de consecuencias imprevisibles. Consciente de este peligro, la Administración de Clinton retrasará un mes la aplicación de esas sanciones, en un último intento de forzar a los japoneses a abrir sus mercados. Las tensiones han provocado una nueva depreciación del dólar frente al yen, con el que ha perdido un 20% en un año y medio.
El ultimátum fue anunciado a las ocho de la tarde de ayer por Mickey Kantor, representante de Comercio de Estados Unidos. Kantor hizo referencia al casoMotorola, precisando que esta empresa había perdido cientos de millones de dólares por las trabas comerciales adoptadas por Japón. Las autoridades norteamericanas consideran que las dificultades encontradas por la compañía de telefonía estadounidense para penetrar en Japón suponen la violación de un acuerdo de 1989 por el que el Gobierno nipón se comprometía a abrir su mercado interior de teléfonos celulares.
Kantor no precisó la lista de productos japoneses que pueden sufrir represalias comerciales por la vía de aumentar las tarifas aduaneras, pero indicó que las sanciones serán proporcionales a la cuantía de los daños sufridos por Motorola.
En un intento de ganar tiempo, el Gobierno japonés reaccionó al ultimátum norteamericano con la advertencia de que no negociará bajo sanciones. Las autoridades japonesas amenaza ron también con denunciar a Es tados Unidos por incumplir los acuerdos del GATT. La crisis coincide con un momento delicado para Japón, agobiado por una nueva crisis de gobierno y sometido a una inusitada presión norteamericana, cuyas consecuencias más inmediatas han sido las dos fuertes subidas con secutivas del yen.
La disputa comercial con Washington ha obligado al Banco de Japón a comprar más de 1.000 millones de dólares para evitar la meteórica apreciación del yen. Página 41
