Las tribulaciones de un equipo para contratar a una china en Alcorcón

"Nos han engañado". La frase resume el estado de ánimo de los responsables del equipo de voleibol femenino de Alcorcón (140.000 habitantes). Un empleado chino que trabajaba como ojeador les ofreció la posibilidad de buscar una tercera extranjera en su país. En octubre del año pasado, Do Juan y Zhang Do, ambas de 25 años, llegaron a Alcorcón para probar por el equipo, y aún no se han estrenado.

"Cuando les pedimos los papeles y el pase internacional nos dijeron que no tenían nada. Venían con el carné en la boca explica Domingo Pozuelo, entrenador del Alcorcón. Tanto Do como Zhang pertenecen a la federación de Shichman, una región que dista 2.000 kilómetros de Pekín.El pase, por el que un país acredita a su. jugadora para fichar por un equipo extranjero, no llega y la posibilidad de jugar se esfuma. El Alcorcón cedió al equipo femenino del Afelsa, canario, a Zhang, y está jugando en Segunda División, donde no es necesario el pase internacional. Do, en cambio, se tiene que conformar con ayudar a sus compañeras en los entrenamientos.

Las negociaciones entre las federaciones de Shichman y Pekín han llegado hasta el extremo de ofrecer al Alcorcón el pase de Do por 3.500 dólares, casi medio millón de pesetas. Sin embargo, en diciembre, Pekín remitió un fax en el que decía que, la jugadora no podía salir fuera de China por ser menor de 26 años.

"Las conversaciones se hacen a través de los empleados de restaurantes chinos de Alcorcón", explica: Pozuelo, aunque también esa tarea ha sido difícil: "Cuando encontrábamos a uno decía que no entendía nada porque le hablaban en chino mandarín; cogías a otro que entendía mandarín y decía que le hablaban en chino cantonés".

En la lucha por conseguir el transfer de la federación china, el Alcorcón ha acudido al Ministerio de Deportes de la república popular, donde no tienen notificación del caso. "Nos dijeron que entonces la jugadora estaba en situación ilegal", recuerda Pozuelo. Otra de las opciones es devolverla a su país, pero en ese caso el club tendría que pagar los billetes de vuelta, ya que ni su región ni Pekín ni la embajada se lo iban a pagar. "Estamos en una situación económica en la que no nos podemos permitir desembolsos", razona Jesús Molina, presidente y médico del Alcorcón. Do no está dispuesta a volver. Sólo sabe jugar al voleibol. Dese los 8 años no ha hecho otra cosa. No tuvo la oportunidad de estudiar. Cuando se le plantea la opción de volver a China, responde: "Quiero quedarme aquí".