Cuatro guardias que dispararon contra una pareja, acusados de imprudencia

Un sargento y tres agentes de la Guardia Civil han sido acusados por la fiscalía de San Sebastián de un delito de imprudencia temeraria por las heridas que le causaron a José Enrique Borda Arribillaga cuando viajaba con su novia en su automóvil por las cercanías de Irún (Guipúzcoa).El fiscal solicita para cada uno de los cuatro inculpados -Marcelino Rivas García, José Cardoso Cabeza de Vaca, Ignació Giles Gordillo y José Luis Moreno García Luján- penas de dos meses de arresto mayor y una indemnización de dos millones y medio por las heridas y secuelas que padece el joven. Borda tiene dificultad en la movilidad del brazo y en la mano derechos, lo que le impide desarrollar su trabajo habitual.

Los hechos sucedieron la madrugada del 21 de enero de 1990 cuando Borda y su novia se dirigían en un coche, propiedad del primero, desde un camino vecinal a Irún tras "pasar un rato de intimidad en el vehículo".

Los guardias dispararon contra la pareja tras realizar señales con una linterna que, según el testimonio de las víctimas, no apercibieron por estar los cristales ligeramente empañados.