González pide manos libres para proponer una ejecutiva en la que seguirá Guerra
Los socialistas dejarán de tener dos cabezas rectoras. El secretario general del PSOE, Felipe González, gobernará el partido con la ayuda de una dirección colegiada, en la que Alfonso Guerra seguirá probablemente como vicesecretario general. Así lo confirmó en la noche del miércoles, en una reunión con periodistas en La Moncloa. González pone dos condiciones para seguir al frente del proyecto socialista: que sus correligionarios le dejen manos libres para reorganizar la ejecutiva y que el congreso federal de marzo anteponga la renovación a la integración de distintos sectores. Todo apunta a que, de los 887 delegados, un 42% serán guerristas; un 35%, renovadores, y un 23%, integradores.Páginas 13 y 14
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