Las obras de los presos de Carabanchel dejan la cárcel
El arte puede surgir en los sitios más duros. Incluso en la cárcel. Los internos preventivos acogidos al Programa de Tratamiento de Toxicomanías de la cárcel de Carabanchel exponen desde hoy sus trabajos artesanales en el centro cultural Galileo de Chamberí. Hasta el 25 de enero muestran piezas de cerámica, madera, escayola, macramé y marquetería.En 1993 participaron en este programa, que depende del Plan Municipal contra las Drogas, 335 toxicómanos presos preventivos de Carabanchel. Son ellos quienes ahora presentan sus trabajos, realizados en las sesiones de actividades ocupacionales. Además reciben seguimiento sanitario, psicológico y social.
Este actividad funciona por medio de un convenio entre el área municipal de Servicios Sociales, y la Dirección General de Instituciones Penitenciarias, del Ministerio del Interior. El programa sigue unas pautas parecidas a las de los Centros de Atención al Drogodependiente (CAD).
La atención a los internos la presta el Servicio Interdisciplinario de Atención a'las Drogodependencias (SIAD), a través de un contrato de prestación.
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