Seis fabricantes japoneses de coches compartirán piezas para ahorrar costes
Las 11 casas automovilísticas japonesas, que han reconocido una importante disminución de ventas en el ejercicio fiscal de 1993, reducen sus inversiones en el mercado exterior y maniobran desesperadamente para remontar la prolongada crisis. Seis de ellas ultiman una nueva fórmula para abaratar costes y remontar la crisis: compartir piezas en la fabricación de vehícualos de baja cilindrada.
El presidente de Daihatsu Motor, Takashi Toyosumi, ha informado en Tokio sobre las conversaciones desarrolladas por representantes de su compañía, Suzuki, Honda, Fuji, Mitsubishi y Mazda, y aseguró que todas llegaron a la conclusión de que compartir piezas, entre ellas el aire acondicionado y la transmisión automática, "es vital" para abaratar costes y sobrevivir en la recesión. Las casas suministradoras más modestas temen la bancarrota, si se concreta la nueva estrategia.Pese a ser mucho más baratos que los modelos convencionales, la venta de minis también ha descendido. El pasado año se vendieron un millón y medio de unidades, un 2,8% menos que el anterior. La caída, sin embargo, ha sido superior en los vehículos de más de 600 centímetros cúbicos: 4,88 millones, un 8% de descenso.
De acuerdo con el criterio del presidente de Suzuki, primera en la producción de los más pequeños, su precio no debe pasar del millón de yenes (aproximadamente 1,3 millones de pesetas), pero en estos momentos casi todos ellos superan esa cantidad en más de 300.000 yenes. De acuerdo con la Asociación Nacional de Distribuidores de Automóviles, el total de ventas registrado, 6,5 millones de unidades, significó un bajón del 7% en relación a 1992, el índice más bajo desde el año 1988. Las dos principales compañías del sector, Toyota, que controla un 31,8% del mercado nacional, y Nissan, sufrieron pérdidas del 7,7% y 8,4%, respectivamente.
Mazda, que figura en el sexto puesto en la relación, ha sido una de las más duramente golpeadas por la crisis. Algunos analistas afirman que Ford, con un 24% de su capital, está perdiendo la paciencia al no observar resultados tangibles en los esfuerzos de la casa japonesa por salir del bache. Mazda colocó 405.000 vehículos y encaja así un descenso del 16,1%, superado únicamente por lsuzu, Hino y Nissan Diesel. El gigante estadounidense ha asignado residencia temporal en Japón a tres de sus ejecutivos para seguir de cerca la evolución de su socio, que ha modificado aceleradamente varios de sus modelos para atraer una clientela que empieza a fijarse en los vehículos de segunda mano.
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