España insta al Gobierno argelino a promover la democracia

El Gobierno español instó ayer a las autoridades argelinas a emprender en serio un diálogo lo más amplio posible con la oposición laica y religiosa de ese país magrebí, con objeto de poner término a la violencia y de promover la democracia, según indicaron fuentes diplomáticas.Este conse o fue trasladado al ministro argelino de Asuntos Exteriores, Salali Dembri, quien ayer realizó una breve visita a Madrid durante la cual fue recibido por el Rey y por el presidente del Gobierno, Felipe González, y se entrevistó con los ministros de Asuntos Exteriores, Javier Solana, y de Economía, Pedro Solbes.

En una brevísima rueda de prensa conjunta, Solana repitió por enésima vez que "Argelia tiene y tendrá el apoyo de España en su lucha contra el terrorismo", pero, al cabo de casi dos años de guerra civil larvada, añadió una novedad: instó a Argel a desarrollar "un diálogo rápido y franco con todas las fuerzas políticas que desean la estabilidad".

El ministro español formuló esta recomendación cuando la conferencia nacional en la que deberían participar, el 25 de enero, las principales fuerzas políticas argelinas que no han empuñado las armas para organizar la siguiente etapa de la transición, parece de antemano abocada al fracaso.

Dificultades coyunturales

Las palabras que pronunció Dembri "fueron lo más parecidas a las de un ministro europeo cuyo país no atraviesa grandes dificultades", ironizóun diplomático español. "No estoy "preocupado", declaró el huésped argelino a la radio francesa, "porque nuestras dificultades son sólo conyunturales". Una y otra vez desmintió que "Argelia esté al borde de la guerra civil" y acusó a los medios de comunicación de dar una visión deformada de lo que allí sucede.Ante sus interlocutores espanoles Dembri denunció además la conspiración islamista contra su país. La guerrilla integrista cuenta, aseguró, con fuertes apoyos y facilidades en países como Iran, Sudán y, en menor medida, Pakistán y recibe fondos de Arabia Saudí que sin compartir sus objetivos pretende así seguir ejeciendo una influencia sobre ese movimiento.

También hizo Dembri una acalorada defensa de los proyectos políticos de su Gobierno tendentes a restaurar la estabilidad y a promover reformas económicas. Hizo hincapié en su empeño de defender a toda costa a las personas y los intereses extranjeros en Argelia. Atacados por los islamistas, numerosos extranjeros han abandonado el país en otoño y este inviemo y varias empresas han cerrado sus oficinas.

A Solbes, el huésped argelino le pidió su respaldo para la negociación que se dispone a iniciar con el Fondo Monetario Internacional (FM1) para reducir los pagos de los intereses de su deuda que ascendía hace un año a 26.000 millones de dólares. El FM1 preconiza para sanear la economía de Argelia una fuerte devaluación del dinar y una total liberalización de su economía que tendría un alto coste social.