Orioli supera a Mas y Arcarons en a primera etapa de navegación .

El italiano Edi Orioli (Cagiva) asestó un primer golpe a los pilotos españoles que le siguen en la clasificación de motos del Rally París-Dalcar-París al imponerse ayer en la décima etapa. Fue la primera jornada de navegación, con 179 kiló metros, y Orioli le sacó dos minutos de ventaja a Carlos Mas (Cagiva), que fue segundo, y casi diez a Jordi Arcarons (Cagiva), que equivocó su ruta y se clasificó sexto. En coches, el francés Pierre Lartigue (Citroén), líder destacado de la carrera, fue el vencedor de la etapa.

Como se temía, Orioli aprovechó su experiencia para orientarse en el desierto y consiguió el triunfo en la primera parte de la etapa maratón que terminará hoy en Atar (Mauritania). Se trata de la primera de las dos jornadas dobles, en las que no está permitida la asistencia mecánica. Habrá otra igual entre el lunes y el martes. Estas etapas son las que todo el mundo considera decisivas para el desenlace de la carrera puesto que después ya sólo quedarán las últimas etapas sin demasiadas complicaciones en Marruecos y en suelo europeo.El veterano piloto italiano reafirmó su liderato respecto a Mas y, sobre todo, respecto a Arcarons, que se equivocó de pista en los inicios de la prueba cronometrada y después ya no pudo recuperar el tiempo perdido. "Me he encontrado frente a un lago que no venía marcado en mi libro de ruta", explicó el piloto catalán.

"Siguiendo lo que señalaba mi GPS (aparato de orientación), he intentado pasar por la derecha", añadió, "y en realidad había que ir por la izquierda. Cuando me di cuenta, volví hacia atrás pero ya no pude atrapar a Orioli y Mas. Desde luego, es un contratiempo pero no es grave. Todavía queda mucha carrera". Arcarons se encuentra ahora a casi 12 minutos de Orioli en la genetal, una distancia que no es insalvable pero que sí empieza a ser preocupante. Ahora deberá atacar para recuperar el terreno perdido.

El despiste de Arcarons ocurrió en los primeros kilómetros de la etapa. Después, a pesar de que hubo navegación, las dificultades no fueron excesivas, como lo demuestra el que Orioli y Mas rodaran prácticamente juntos durante todo el día y que las diferencias con pilotos menos experimentados, como los rusos Nyfontov y Povarov (Cagiva), o con mecánicas inferiores, como Carlso Sotelo (Honda), quinto ayer, fueron muy pequeñas.

La parte realmente complicada de esta etapa maratón es la que se desarrolla hoy, con 600 kilómetros cronometrados. A Arcarons ya no le vale controlar a Orioli. Necesita superarle claramente y en esta jornada encontrará terreno donde jugársela. Por contra, los cuatro minutos de desventaja que acumula Carlos Mas todavía le permiten al barcelonés mantener una táctica más conservadora. Lo que quedó claro ayer es que Edi Orioli es el favorito, el hombre a batir en esta segunda parte del rally.

En la categoría de coches, Pierre Lartigue (Citroën) volvió a dominar. Consiguió la victoria en la prueba cronometrada por delante de su compatriota Jean Pierre Fontenay (Mitsubishi) y de su compañero de equipo Hubert Auriol. En la general su ventaja sobre el segundo, el japonés Kenjiro Shinozuka (Mitsubishi), que ayer fue sexto y perdió otros seis minutos, ya es de más dé una hora.

Problemas a diario

Los representantes de la marca nipona, que al principio eran los grandes favoritos de la prueba, no se libran de los problemas mecánicos prácticamente ningún día. Ayer fue el alemán Erwin Weber quien, volvió a padecerlos. Las dificultades de Mitsubishi han permitido que Citroën, que había anunciado una participación sin pretensiones, preparativa para la Copa del Mundo, esté consiguiendo un triunfo holgado.Por parte española, Salvador Serviá (Lancia) fue otra vez el mejor ayer. Se clasificó sexto de la etapa y mantiene la séptima posición en la clasificación, a cinco horas y media de Lartigue.