La fundación que presidió Rosales pugna por una herencia para vivir

La caudalosa herencia dejada hace dos años por el vecino de Cercedilla José María Vázquez es la única salvación a la crisis económica que atraviesa la fundación cultural de esta localidad. La asociación fue fundada en 1971 por vecinos de Cercedilla (4.000 habitantes) y fue presidida, hasta su muerte, por el escritor Luis Rosales.El fallecido, que apenas mantenía contactos con la asociación, legó de forma sorprendente importantes bienes inmuebles y una pequeña cantidad de dinero que debía ser compartida con un familiar.

Sin embargo, pronto surgieron contenciosos con terceras personas que reclaman una parte de las propiedades. Aunque los miembros de la Fundación no desean hablar del asunto, en juego está un chalé en una lujosa zona de la capital y dos pisos en el centro de Madrid, según personas cercanas al caso.

Los primeros fondos de la asociación llegaron de la mano de los pintores Viola y Bardasamo. Actualmente recibe de la Comunidad de Madrid una subvención anual de medio millón de pesetas. "Con ella apenas podemos cubrir el déficit que arrastramos", dicen sus responsables.