La familia de Susana pide a la juez que ordene 19 careos

Madrid El ¿aso de Susana Ruiz, la joven de 16 años cuyo cadáver fue hallado hace un año casi enterrado, en un descampado próximo a Vicálvaro, sigue abierto. El nuevo abogado de la familia, Hermenegildo Pérez Bolaños, (que tomó las riendas del caso en noviembre pasado) pretende reactivar- la investigación judicial. Cree que aún quedan muchos cabos sueltos.Ha pedido a la juez que lleva el caso que interrogue a 24 muchachos, conocidos y amigos de Susana, y que practique 19 careos entre ellos. Esos jóvenes a los que se quiere llamar a declarar son los mismos que estuvieron en la chabola donde se celebró el cumpleaños al que asistió la joven el 9 de enero de 1993. Oficialmente, fue la última vez que se la vio con vida.

Pérez Bolaños demanda a la juez que interrogue de nuevo a los amigos y conocidos de Susana Ruiz porque considera que algunos de ellos han incurrido en contradicciones en las declaraciones que prestaron ante la policía cuando comenzó la investigación del caso. También pide que se muestren a 17 jóvenes algunos objetos hallados con el cadáver de Susana y las fotografías que se tomaron de ella.

El letrado de la familia reclama al juzgado que se elabore un plano detallado de la zona donde se encontró el cadáver, varias pruebas de grafología y que se identifiquen algunas voces registradas en un mensáfono, con posterioridad a la desaparición de Susana y que se le habían atribuido a ella.

Un número y un papel

Este abogado deja entrever que el cadáver de Susana pudo haber sido trasladado por alguien al lugar donde finalmente fue hallado. Considera que la ruta que utilizó de noche para ir desde la chabola hasta su domicilio, junto al instituto de Las Musas, a través del descampado, era tan impracticable como inadecuada.

Pretende que se elabore un plano, con distancias exactas, entre la chabola, el instituto y la población de Coslada para demostrar ese extremo.

La autopsia practicada a la muchacha no ha aclarado las causas de su muerte, aunque, según Pérez Bolaños, sí constata signos de violencia. "Violencia que sólo pudo cometer otra persona", subraya. "Los análisis de sus vísceras no muestran restos de alcohol ni de sustancias tóxicas", agrega. Pérez Bolaños asegura también que el golpe que presentaba la joven en la cabeza no se corresponde ni con una caída ni es fruto de un golpe".

El letrado ha pedido también que se someta a una prueba grafológica a 31 personas para aclarar quién escribió con rotulador en una tira de papel negro hallado a Susana, un número relativo a una cantidad de dinero.

"Después de su desaparición, seis personas, que han sido identificadas y que no tienen ninguna relación entre sí, han confesado que la vieron viva", apostilla el letrado.