Más que un rumor

La Comisión Nacional del Mercado de Valores suspendió la cotización de Banesto tal día como ayer, 28 de diciembre, y no dio explicación alguna al mercado. Antes de conocer esa decisión, los inversores se habían servido a gusto con una serie de rumores sobre la salud financiera de la entidad y su posible intervención por parte del Banco de España, lo que provocó una caída de la cotización de hasta el 10,5%. En el momento de la suspensión cautelar de la contratación, las acciones de Banesto perdían un 6,5% y se habían intercambiado poco más de 400.000 títulos. El desconcierto cundió en el mercado y los inversores retomaron la disposición vendedora de la víspera, es decir, que la mayorçia optó por materializar beneficios.El volumen negociado en esta jornada fue de casi 35.000 millones de pesetas efectivas, cantidad digna de mejor suerte de haberse generado en otras circunstancias, pues la mayor parte de esa cifra surgió de la crisis nerviosa que sufría el mercado ante la acumulación de rumores. El Banco de España esperó a que la Bolsa cerrara sus puertas para emitir un comunicado esclarecedor, pero en ese momento los inversores tan solo pensaban que no habían vendido lo suficiente.

Las grandes bolsas se orientaron a la baja, con lo que negaban apoyo alguno a un mercado que no contaba con que la crisis económica alcanzara de lleno al sistema financiero.

El índice general de Madrid perdió un 1,35%, 4,37 puntos, aunque en los peores momentos del día llegó a ceder hasta un 1,67%. El Ibex 35 baja un 1,57%, 57 puntos que le llevan hasta el 3.574.