El Gobierno británico concede permiso navideño a 264 presos por terrorismo

Más de 250 presos por delitos de terrorismo, entre ellos 90 condenados a cadena perpetua, marcharon ayer a sus casas en Irlanda del Norte. El Gobierno británico optó por hacer más generosa que nunca su política de permisos navideños, con el fin de que los reclusos perciban durante los próximos días la voluntad de paz de la mayoría de la población norirlandesa. Los siete días de permiso deben permitir también que la dirección del IRA, parte de la cual está en la cárcel, debata la propuesta de paz anglo-irlandesa. El IRA anunció ayer su habitual tregua navideña de tres días, mientras Londres esperaba una ampliación a tres meses.

En opinión de los Gobiernos del Reino Unido y la República de Irlanda, las próximas jornadas serán cruciales. John Major tiene la esperanza de que las breves 72 horas de tregua del IRA se extiendan hasta un plazo de tres meses, con lo que se cumpliría el mínimo exigido en la Declaración de Downing Street para aceptar la inclusión del Sinn Féin (brazo político de la organización terrorista proirlandesa) en una negociación multipartidista sobre el futuro de Irlanda del Norte.Gerry Adams, presidente del Sinn Féin, no cerró ninguna puerta en el mensaje navideño que dirigió ayer a su gente. Adams afirmó que el Sinn Féin estaba "comprometido en la búsqueda de la paz" y, aunque volvió a reclamar "clarificaciones" a ciertos puntos de la propuesta anglo-irlandesa, dijo que las próximas festividades serían idóneas para debatir y decidir una respuesta a la oferta formulada hace nueve días por Londres y Dublín.

Adams valoró muy positivamente que en la propuesta angloirlandesa se destacara "por primera vez, como prioridad en la agenda política británica, el derecho de autodeterminación de Irlanda del Norte".

De los presos que recibieron permiso ayer, 149 eran del IRA (50 condenados a encarcelacimiento de por vida) y 115 de las bandas unionistas UDA (Ejército de Defensa del Ulster) y UFF (Luchadores por la Libertad del Ulster), entre ellos 40 condenados a perpetuidad. Entre los presos del IRA que salieron a la calle estaba Brendan McFarlane, uno de los máximos dirigentes de la organización y jefe de todos los republicanos encarcelados. Otros 200 presos eran comunes, lo que la policía norirlandesa suele llamar "criminales decentes y ordinarios".

El Gobierno del Reino Unido empezó a conceder libertad navideña a presos por terrorismo hace más de 20 años y, hasta ahora, absolutamente todos, tanto republicanos como unionistas, han regresado puntualmente a la cárcel cada año al concluir el permiso.

Los servicios de inteligencia británicos opinan que la mayoría de los presos del IRA están a favor de la paz, siempre que se conceda una amnistía o, al menos, una reducción generalizada de las penas. Aunque John Major rechazó rotundamente esta semana la concesión de una amnistía a los terroristas, parece claro que estaría dispuesto a reducir sensiblemente las penas, y a poner directamente en la calle a quienes no hubieran cometido delitos de sangre, una vez el IRA renunciara oficialmente y para siempre a las armas y se integrara, a través del Sinn Féin, en el diálogo político.