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UGT pide la suspensión de pagos para IGS-PSV

El sindicato pone en marcha su matrimonio y el Gobierno estudia una posible intervención

La central UGT solicitará hoy la suspensión de IGS, gestora de PSV, tras evitar. El Gobierno, a través del Crédito Oficial (ICO), concedió nuevo crédito de 1.200 millones de pesetas a la sociedad de crédito de IGS-PSV y accedió a un trasvase de deuda de 8.000 millones de la cabecera IGS a UGT para evitar la quiebra del grupo y de su cooperativa de viviendas. Durante tres horas, de hecho, la gestora de PSV estuvo al borde del abismo. Un acuerdo entre UGT y los acreedores que habían solicitado la intervención del juez evitó in extremis la declaración de quiebra de IGS. La suspensión de pagos, según aseguró el sindicato, facilitará la venta ordenada de activos y evitará nuevas demandas. La suspensión de pagos durará entre seis meses y un año. Por otra parte, el Gobierno no descarta intervenir en la cooperativa. En un primer paso, el director de cooperativas ha solicitado las cuentas de PSV.

La intervención del Gobierno no la descartada, según fuentes de Administración, si bien, no se decidido su grado, ni el momento de hacerlo. El primer paso la implicación del Gobierno está dado. El miércoles, el diario de cooperativas, Juan José irrera, requirió oficialmente al presidente de PSV, Paulino Baabés, las cuentas de PSV."Los intereses de los cooperavistas quedan salvaguarda)s". Así resumió el presidente - IGS desde octubre, Prudencio García, los efectos que tendrá la suspensión de pagos sobre los 200.000 socios de PSV.

Prudencio García y el secretario de organización de UGT, Antón Saracíbar, ofrecieron en la tarde de ayer una conferencia e prensa para explicar la textil de la tabla de salvación conseuIda para IGS y para PSV. Saicibar explicó que "UGT aportará a IGS 9.200 millones de pesetas" en una operación en la que el sindicato "aporta todo su patrimonio, incluido el histórico".

Sin embargo, los 9.200 millones no son dinero nuevo. Del total, 1.200 millones, según aclaró ayer un portavoz del ICO, constituyen una línea de crédito abierta a IGS del Mercado Hipotecario "para completar las nececidades" de la sociedad. Con el -esto, 8.000 millones, se lleva a cabo una operación de trasvase le deuda. La operación es simple. El ICO concedió en octubre in crédito de 8.000 millones a GS y a UGT "solidariamente". En aquella operación, el sindicato actuaba como avalista. Ahora, el crédito se trasvasa a UGT, que a su vez lo inyecta a IGS. El resultado es que UGT carga con la deuda e IGS cuenta con dinero en un contexto de cuentas limpias. En el proceso, UGT compromete todo su patrimonio. ¿Por qué valor? UGT, según reconoció ayer Saracibar, que tampoco detalló las condiciones del nuevos crédito, no sabe cuánto vale exactamente su patrimonio.

Lo importante es que, además de evitar la quiebra, la inyección de capital evitará reclamaciones como las efectuadas por el empresario catalán José Oriol Rabassa (responsable de Construcciones Continental, en suspensión de pagos) y dos' empresas más.

Venta de activos

Para proteger a la sociedad, además, UGT, a través del bufete de Garrigues Walker, solicitará hoy la suspensión de pagos. Según explicó Prudencio García, la suspensión, supervisada por un juez, permitirá la venta ordenada -no la liquidación- de activos de IGS valorados en más de 6.000 millones de pesetas. Con un retraso "de algunas semanas", afirmó Prudencio García, empezará la construcción en las promociones de PSV. El proceso de escisión de PSV en cooperativas de primer grado proseguirá.

Por primera vez en muchas semanas, en la conferencia de prensa de ayer, las siglas IGS no se mezclaron con rictus de irritación en los rostros de los ugetistas. El día había sido duro, y se había evitado lo peor. El juez Miguel María Rodríguez San Vicente había decretado por la mañana la quiebra de IGS. Sin paliativos y ante las cámaras de TVE. La quiebra duró tres horas. Se levantó cuando el juez tuvo constancia de que UGT había pagado los 250 millones solicitados por sus acreedores.

Las negociaciones con los acreedores y la búsqueda del juez que había decretado la quiebra para que la levantara se llevaron a cabo en un momento crudo: en la sociedad IGS del Mercado Hipotecario, tres liquidadores enviados por el Banco de España se hacían cargo de la empresa y anunciaban que los titulares de cuentas ahorro-vivienda, podrán retirar sus depósitos a partir del 11 de enero. Momentos tensos, de declaraciones cruzadas de sindicalistas, políticos y portavoces. Un mal día que aún fue peor para quien debía estampar su firma en los documentos de salvaion secretario que fianzas de UGT, Sebastián Reya. A Reyna, prácticamente a la puerta del juzgado, le comunicación el fallecimiento súbito de su padre.

Con IGS del Mercado Hipotecario en liquidación y la aseguradora Unial a punto de hacer su entrada -lo hará el día 3 de enero- en la Comisión Liquidadora de Entidades Aseguradoras (CLEA), las patas financieras del grupo IGS dejan de ser problema para los gestores del grupo. Unial entrará en la CLEA, según fuentes del grupo, para su "liquidación voluntaria".

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