La Policía busca a un peligroso 'narco' fugado del penal de Alicante
La policía y la Guardia Civil buscan desde el pasado viernes al escocés Julian Desmond Chisholm, de 31 años, que logró escapar de la prisión alicantina de Fontcalent en unión de Otmane Ahmed, de 32 años, un francés nacido de Argelia, preso en España desde 1990 y con cuatro expedientes de extradición.Ambos, considerados como peligrosos, se fugaron cuando iban a ser trasladados a la cárcel de Picassent (Valencia). Chisholm está reclamado por el sheriff de Grampian Highlands por considerarle presuntamente relacionado con un importante alijo de cocaína decomisado en 1991 en Ullapool (norte de Escocia).
La fuga se produjo sobre las siete y media de la mañana, cuando Chisholm y Ahmed, ambos clasificados en primer grado penitenciario por su peligrosidad, aprovecharon para zafarse un descuido de los guardias civiles cuando iban a ser introducidos en un furgón.
La puerta del recinto carcelario es de reducidas dimensiones y no permite la entrada de los furgones policiales, por lo que los presos tienen que acceder a los mismos andando. Esa circunstancia fue aprovechada por los dos reclusos para escapar a la carrera, tras saltar la valla de la prisión de Fontcalent. Los guardias no usaron sus armas, debido a la presencia de familiares de otros reclusos en las inmediaciones.
Huida inexplicable
Los dos presos lograron soltarse los grilletes "de forma inexplicable". Chisholin, que es conocido como mister Big (el señor Grande), fue detenido en el mes de mayo del año pasado en Calahonda, en la localidad malagueña de Mijas-Costa, desde donde supuestamente dirigía una red de narcotráfico vinculada al colombiano cartel de Cali, según fuentes británicas.Chisholm fue detenido por la Policía Judicial con un pasaporte expedido a nombre de Alan Lumsden y durante meses mantuvo que ésta era su verdadera identidad. Sin embargo, las posteriores investigaciones policiales determinaron que se trataba de Chisholm, tras lo que las autoridades escocesas determinaron solicitar a España la entrega del presunto narcotraficante.
La Costa del Sol es habitual refugio de delincuentes, entre los que hay una numerosa colonia de británicos que se dedican a canalizar el tráfico de hachís hacia su país y al lavado de dinero en Gibraltar.
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