Ley de Asilo impone un sistema "acelerado" y sin garantías, según IU
El Congreso prevé debatir hoy la Ley de Asilo, que introduce un procedimiento "acelerado" para determinar en sólo siete días si se admite o no a trámite la solicitud del demandante. El Gobierno dice que con esta ley se está dando "la protección más alta" posible a los perseguidos. Pero el proyecto gubernamental cuenta con la frontal oposición de destacados diputados socialistas, entre ellos el ex magistrado Ventura Pérez Mariño. IU opina que con esta ley "nos vamos a cargar el derecho de asilo" y exige que el demandante pueda acudir a la vía judicial si el Gobierno rechaza su petición.
Este año se espera que haya en España 14.000 solicitantes de asilo. Fernando Puig de la Bellacasa, director general de Política Interior, cree que "la inmensa mayoría pertenece a países en los que no existe persecución política" y que la vía de asilo está siendo utilizada, "de una forma mayoritaria, para intentar superar los controles migratorios".El 59% de las solicitudes de asilo que se tramitan en la oficina de la calle de Pradillo, en Madrid, "se basan única y exclusivamente en motivaciones de tipo económico -laboral", según el Ministerio del Interior. Este re conoce que la oficina se ha con vertido en "una máquina de de negaciones". De hecho, el año pasado sólo se concedió estatuto de refugiado a 543 personas (el 4% de los solicitantes).
El procedimiento "acelerado" de inadmisión a trámite que pretende poner en marcha el Gobierno será aplicable tanto para los demandantes que cursen su solicitud en puestos fronterizos como para los que lo hagan dentro del territorio nacional. Ahora, sólo el 2% de las demandas se presentan en las fronteras.
El sistema que se pondrá en marcha fija un plazo máximo de cuatro días, en los que las autoridades deben de determinar si la petición está fundada o no. Por recomendación del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), si la decisión es negativa, el peticionario podrá recurrir al ministro del Interior, que tendrá que dictaminar en el plazo de tres días. Si el ministro confirmara la decisión negativa, al solicitante ya sólo le quedaría acudir a la larga vía contencioso administrativa. "El ministro resolverá de forma omnímoda. Y cuando el recurso contencioso-administrativo se resuelva dos años después, dónde estará el solicitante...", se queja el diputado Diego López Garrido, de IU.
"¿Cree realmente el Gobierno que es posible examinar en siete días, con todas las garantías, las solicitudes de asilo sin que haya ninguna otra garantía de recursos judiciales contra una posible resolución infundada de la Administración?", inquiere López Garrido. Éste no entiende por que el Gobierno se niega a facilitar que el demandante de asilo acuda a los jueces y que estos dictaminen en el plazo de 10 días.
El parlamentario de IU es partidario de que el estudio de las solicitudes sea competencia de los delegados del Gobierno y que contra su resolución sea factible apelar al Tribunal Superior de Justicia correspondiente, que tendría que fallar en cuestión de días. Sin embargo, el director general de Política Interior asegura que no son competentes los tribunales superiores, sino la Audiencia Nacional, y que ésta no tiene mecanismos para resolver en tan poco tiempo.20 millones de refugiados
Puig de la Bellacasa y López Garrido discrepan sobre qué es lo que ocurre en Europa. Mientras el primero sostiene que el procedimiento está aceptado por el ACNUR y es similar al que habrá en España, el segundo asegura que en otros países hay posibilidad de que el solicitante acuda a los jueces contra la decisión de la Administración.
Según el diputado de IU, en Dinamarca es posible un recurso de apelación suspensivo contra el Danish Refuting Council, que es una entidad independiente del Ejecutivo; en Holanda, Portugal y Reino Unido hay recursos suspensivos y en Alemania también es factible presentar un recurso suspensivo ante el tribunal administrativo. "España se sitúa así no precisamente a la cabeza, sino al final en cuanto a garantías para el demandante de asilo", concluye López Garrido. En el mundo hay 20 millones de refugiados, dos millones de ellos en Europa.
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