El juez aplaza el interrogatorio de Julio Iglesias hasta recuperación

FRANCISCO MERCADO Carlos Bueren, titular del Juzgado número 1 de la Audiencia Nacional, retrasará la toma de declaración de Julio Iglesias Zamora, secuestrado 117 días por ETA, hasta que reciba un informe médico que garantice el perfecto estado psíquico del ex rehén. Su declaración ante la policía, de tono suave y carácter preliminar en atención también a su largo cautiverio, apenas ha aportado datos para la investigación.

Desde la Audiencia Nacional tampoco se ha recabado el interrogatorio de Ángel Iglesias, tío del rehén, a pesar de que un diario vasco informó que negoció personalmente el rescate. en un monte con encapuchados, dato cuya veracidad cuestionan los responsables de esta 'investigación, por entender que el trato directo con la banda no ha sido llevado por este familiar, sino por emisarios suyos.En medios de la Audiencia Nacional se considera poco creíble que Ángel Iglesias, cuyos pasos han sido estrechamente controlados, cometiera la imprudencia de ir a negociar a un monte, riesgo difícilmente asumible por sus interlocutores etarras.

Responsables de la investigación interpretan como un deseo de exculpar a terceros el mensaje de que el peso de la negociación la llevó el propio Ángel Iglesias y en un contexto de intimidación, elemento que actuaría como salvaguarda para la acción de este familiar, que podría esgrimir estado de necesidad caso de que un juez le llamara a declarar. En la Audiencia Nacional no se tiene constancia aún del pago del rescate, que fuentes de la investigación cifran en 500 millones, por lo que no se actuará contra las personas que han intervenido en las gestiones hasta que aparezcan elementos concluyentes.

Oculto en un caserío

La declaración de Julio Iglesias a la policía apenas aportan datos de interés. No obstante, el perfil del lugar donde ha estado oculto cuatro meses parece encajarse más en un caserío que en una vivienda urbana. Varios elementos lo apuntan: la humedad existente en el habitáculo y el hecho de que dispusiera de una batería para suministrar corriente.

Se deduce que el atáud blanco estaba bajo tierra, pero no a gran profundidad, ya que el rehén apreciaba los cambios de temperatura. Igualmente, se aprecia que ETA ha mejorado su tecnología para ejecutar secuestros. Así ,la insonorización del zulo ha sido perfecta, mientras que Emiliano Revilla oía trenes y cierre de puertas desde el escondrijo.

Los etarras facilitaron ejemplares de Egin censurados y libros al secuestrado, y también música mediante un walkman, con cintas de clásica o chistes de Eugenio. En varias ocasiones jugaron al mus con el rehén.

Por otra parte, los trabajadores de lkusi participaron ayer en una concentración en San Sebastián como muestra de agradecimiento por la solidaridad de los donostiarras durante el secuestro. El consejero vasco de Interior, Juan María Atutxa, que asistió a la concentración, criticó a responsables de organizaciones radicales al afirmar que la alegría de algunos con la liberación se debe a que "están a la espera de cuál va ser su participación en el reparto" del rescate.