FLORES FRESCAS PARA QUE NO SE MARCHITEN LOS RECUERDOS.

Mañana es el Día de Todos los Santos y los tranquilos cementerios de la comunidad sufrirán los atascos de las ciudades de los vivos. La Policía Municipal y las empresas de transportes ya han tomado precauciones para una jornada en que las necrópolis se convertirán, por unas horas, en metrópolis. Las flores serán mañana el único pasaporte para entrar al país de los seres más queridos. Crisantemos y rosas abandonarán en masa las puertas de los cementerios y poblarán las lápidas de colores. Con las flores aún húmedas, como éstas, al camposanto llegarán las voces, las plegarias y un poco de compañía.