La Trilateral califica de 'muy posítivo' el pacto entre el Gobierno y los nacionalistas

La Comisión Trilateral destaca la tendencia a la estabílízación política en España, que se mantendrá "gracias al pacto, muy positivo, entre el Gobierno socialista y los grupos nacionalistas" según afirmó ayer. Otto Lambsdorff, presidente europeo de este club financiero privado de élite que reúne a los patronos de las grandes compañías multinacionales. El representante japonés en Barcelona, Akio Morita, presidente de Sony, puso mucho énfasis al manifestar la voluntad de las corporaciones niponas de mantener sus activos en el mercado español.

Entre los miembros de la Comisión Trilateral -cuya sección europea se reunió el pasado fin de semana en Barcelona- existe el criterio unánime de que las devaluaciones de la peseta han contribuido a reforzar la actividad económica española. En las ponencias debatidas por más de cien empresarios y ex altos cargos políticos de 14 países industrializados, se subrayó que, con una tasa de desempleo del 23%, España está a la cabeza del paro en Europa. La Trilateral se preguntaba por la veracidad de este índice de desempleo, "sobre todo a la hora de confrontarlo con la enorme estabilidad social que demuestra este país", señalaba el propio Lambsdorff. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que asistió a la última sesión de la Trilateral, manifestó que lo más importante ahora, tras aprobarse los presupuestos, es modificar la legislación laboral.Los trilateralistas, acusados siempre de secretismo, propugnan, como cuestión de mayor profundidad, la auténtica refundación del Fondo Monetario Internacional, "nacido en la conferencia de Bretton Woods y desencadenante de la armonización monetaria que debemos proseguir dando ahora un salto cualitativo", en palabras der Otto Lambsdorff. La búsqueda del nuevo orden monetario es "urgente, porque el dólar, el marco y el yen no cumplen la función de moneda mundial y porque sólo la estabilidad cambiaria puede frenar la sensación de casino provocada por las tormentas monetarias". Paul Volcker, ex presidente de la Reserva Federal, secundaba este criterio al recalcar la diferencia de tipos de interés entre las tresregiones -en EE UU y Japón están entre el 2% y el 3%, mientras que en Europa están entre el 6% y el 100%-, por lo que la gobernabilidad económica del mundo "obliga a la convergencia monetaria y fiscal".

Fundada en 1973 e inspirada por el estratega Zbigniew Brzezinski, la Comisión Trilateral ha centrado su esfuerzo en coordinar las acciones del mundo financiero con una visión amplia que supera la de los gobiernos nacionales y que expresa en realidad la concepción industrial y comercial de las grandes multinacionales. Los documentos de trabajo de la llamada Internacional capitalista, cuyos próceres intentan revitalizar desde que el siglo entró en su última década, serpentean hábilmente entre el poder político y el mundo de, los negocios. Éste es el caso del borrador sobre la citada armonización de las tres grandes regiones económicas que elabora Fred Bergsten, director del Instituto para la Economía Internacional de Washington, auténtico crisol de los asesores económicos del presidente Bill Clinton, a su vez miembro (hoy excedente) de la organización.

Riesgos

Los riesgos financieros en el mundo empiezan a descender en la medida en que se van reduciendo los tipos de interés y mejora la situación de los mercados de valores internacionales. A los principales ejecutivos de las compañías multinacionales no les atemoriza tanto el riesgo estrictamente financiero como el éxito o el fracaso de la Ronda Uruguay en el marco del GATT o los acuerdos regionales como el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Canadá y México (Nafta). "Si en ambos casos no se alcanzan pactos muy concretos, se generarán altos niveles de desconfianza que pueden acabar provocando tensiones y nuevas tormentas monetarias", señaló Paul Volcker, que acudió como presidente de la Trilateral para el bloque norteamericano.

Según la Trilateral, el europtimismo español esta siendo una de las palancas energéticas a la hora de avanzar hacia el mercado único de los Doce.