La fiscalía mantiene para El Barbó una peticion de 50 años de cárcel
El fiscal no ha dado ningún crédito a la versión de Juan de Dios Rueda, El Barbó, sobre los encapuchados árabes. Ayer, último día del juicio, mantuvo que debe ser condenado a un total de 50 años de cárcel por los dos asesinatos -uno, frustrado- ocurridos en el bar El Parador el 3 de julio de 1991. Un testigo modificó ayer su declaración anterior y confesó al tribunal que se encontraba en el servicio del bar cuando se produjeron los disparos.
Félix Rodríguez, otra de las personas que se hallaban en El Parador el día de los hechos, desconcertó al tribunal. Tenía que haber declarado el martes, pero no lo hizo porque estaba recluido en una prisión.En un principio, Rodríguez, junto con otros testigos, acusó a Juan de Dios Rueda de ser el autor de los tres disparos que mataron a Juan Francisco Liébana y que dejaron malherido a Enrique Burgos. Ayer, sin embargo, relató que El Barbó es su amigo y que, cuando se produjo el tiroteo, él estaba en el retrete del bar El Parador. "Escuché los tiros cuando estaba en el servicio; luego vi los dos cuerpos tendidos en el suelo, pero salí corriendo del bar y no vi a nadie más". Según Rodríguez, en un principio acusó a El Barbó ante el temor de que el juez instructor le metiese en la cárcel por encubridor.
Para el fiscal, las distintas versiones que han ido ofreciendo los testigos a lo largo de la investigación judicial tiene un motivo: el miedo a posibles represalias. Aferrándose a los testimonios ofrecidos por tres testigos en la sesión del martes y a otras pruebas que constan en el sumario, el fiscal demandó ayer al tribunal que imponga a Juan de Dios Rueda 50 años de cárcel: 28 por el asesinato de Liébana, 20 más por el frustrado de Burgos (principal testigo del caso) y otros dos por utilizar sin licencia el revólver con el que, presuntamente, disparó sobre ambos.
A su juicio, El Barbó la emprendió a tiros contra Llébana y Burgos por una cuestión relacionada con las drogas. Es incierto, según el acusador público, que los autores del tiroteo fueran, como sostuvo el procesado, unos encapuchados extranjeros que salieron huyendo del local tras cometer el crimen.
"Proceso irregular"
El abogado defensor de Juan de Dios Rueda cuestionó ayer la validez de la investigación judicial. Se basó en que existe un escrito del juzgado instructor en el que se comunica a los testigos su ingreso en prisión como encubridores. Por eso decidieron los testigos declarar contra El Barbó, según la defensa. Si se les comunicó que iban a ingresar en prisión, eso significaba que estaban detenidos. Sin embargo, no contaron con la preceptiva asistencia de un letrado.La sentencia será dada a conocer dentro de varios días. Sin embargo, Rueda volverá a sentarse en un banquillo de la Audiencia dentro de unos meses. Antonio García Pablos, abogado de la familia del urólogo Eugenio Rivero, asesinado de un tiro en la nuca un mes antes del doble crimen de El Parador, sostiene que el autor de este crimen fue también El Barbó.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.