Yeltsin baraja convocar elecciones simultáneas en 1994

El líder ruso, Borís Yeltsin, dio a entender ayer, por medio de sus allegados, que puede aceptar el compromiso de elecciones legislativas y presidenciales anticipadas y simultáneas y realizarlas el año próximo. Este compromiso será posible si el "circo" de la Casa Blanca (edificio que alberga el Parlamento ruso) se acaba, manifestó el jefe de la Comisión Electoral, Nikolái Riabov. La medida acabaría con las reticencias a apoyar a Yeltsin de numerosos dirigentes territoriales de la Federación Rusa, que le habían dado un ultimátum para que aceptara este compromiso antes del próximo martes.

El Parlamento, cada ' día más aislado, votó el viernes a favor de la renovación a la vez en marzo de 1994. del Congreso de los Diputados y de la Presidencia.Riabov reconoció que el equipo presidencial se va a ver muy apurado para celebrar los comicios parlamentarios el 11 y 12 de diciembre, tal como lo decretó Yeltsin. Las elecciones simultáneas permitirían a Yeltsin prestar su apoyo de caudillo a los sectores reformistas, que, en solitario, se las verían en un trance más complicado. El sentir popular de los rusos favorece las actitudes decididas, y Yeltsin dijo ayer al canal de la televisión interestatal que la situación estaba tranquila, porque "la gente ve que hay poder y que este poder actúa de forma decidida".

En la sede del Parlamento, inasequibles al desaliento, seguían resistiendo anoche el jefe del Sóviet Supremo, Ruslán Jasbulátov, y el vicepresidente, Alexandr Rutskói. Yeltsin calificó lo que estaba sucediendo allí de "farsa" con la que había que acabar. Sin embargo, Jasbulátov anunció por la noche que se habían tomado precauciones, para continuar las actividades del Parlamento en una ciudad de provincias, si el "golpe" triunfaba en Moscú. Entre las hipótesis que se barajaban ayer sobre el posible exilio del Parlamento a un lugar más favorable para sus actividades estaban la ciudad siberiana de Novosibirsk y San Petersburgo.

La clara victoria de Yeltsin en todo el Estado no significa que el líder ruso haya superado problemas con los territorios forman la Federación. El eje e conflicto entre el presidente y sus adversarios está en las provincias. Dirigentes de 28 territorios habían firmado un ultimátum en el que exigían la convocatoria de elecciones simultáneas de Parlamento y presidente. El ultimátum daba hasta el 28 de septiembre de plazo y amenazaba con medidas de presión política y económica, incluida la huelga.

En el canal de la televisión interestatal, Yeltsin dijo que el 80% de los rusos le apoyaban, pero admitió que los sóviets en provincias estaban divididos al 50% en partidarios y adversarios de sus medidas. El presidente precisó que esta división afectaba a la dirección de los soviets, más que a las asambleas que los forman, y amenazó con responsabilidades a los soviets díscolos, si no reconsideran sus posiciones. Y para demostrar que iban en serio promulgó ayer un decreto de depuración de los funcionarios que contrariaran la voluntad del presidente. La primera víctima fue Yuri Lodkin, jefe de la Administración de la provincia de Briansk, que se había opuesto al decreto del 21 de septiembre.

En previsión de las medidas económicas que se avecinan, el presidente firmó otro decreto en el que se estipulan compensaciones a las familias menos favorecidas por el incremento del precio del pan. Y para tranquilidad de los ex funcionarios del Parlamento, Yeltsin estampó su firma bajo una lista de amplias garantías sociales.

El jefe de la Administración Presidencial, Serguéi Filátov, propuso ayer celebrar elecciones simultáneas de presidente y cámara alta de la Asamblea Federal (el nuevo Parlamento) el 12 de junio de 1994. Filátov, que defendió esta propuesta ante una sesión de tres cámaras de la Conferencia Constitucional, manifestó que Yeltsin había firmado el decreto por el que disolvía el Parlamento, en parte como resultado de los obstáculos que los sóviets provinciales habían puesto al proyecto constitucional.Resistencia

Las elecciones conjuntas presidenciales y parlamentarias pueden encontrar resistencia en los territorios, en el caso de que se decidiera elegir las dos cámaras del Parlamento, es decir, no sólo la Duma Estatal, sino también el Consejo de la Federación, la cámara alta, que estará formada por representantes de los territorios. Esta eventualidad acortaría el mandato de los organismos locales de poder, que concluye en 1995.

Muchos miembros del equipo presidencial creen que unas elecciones simultáneas favorecerían a los demócratas. Entre los requisitos establecidos por la Comisión Electoral para poder participar en las elecciones está la recogida de 200.000 firmas, lo que da ventaja a los partidos disciplinados y organizados, como es el Partido Comunista.

Para hoy, se ha convocado un mitin de apoyo al presidente en el centro de Moscú. Los partidarios del presidente estaban divididos sobre la conveniencia del mismo. Uno de los argumentos a favor era que la televisión necesitaba imágenes de apoyo al presidente. Los problemas que Yeltsin tendrá en sus propias filas se multiplican con el paso de los días.