Rabin exige a Siria que pruebe con hechos sus deseos de paz con Israel

El primer ministro israelí, Isaac Rabin, y Yasir Arafat, el presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), regresaron ayer a sus despachos tras las intensas horas vividas desde que el lunes se dieran la mano en Washington. Rabin aprovechó la ocasión para mostrar que media un largo camino para conseguir la pacificación de Oriente Próximo. "Siria tiene que demostrar su deseo de paz", dijo. "Con una mano nos ofrece la paz y con la otra dispara contra nosotros".Rabin declaró en Tel Aviv que la paz con Líbano puede firmarse de aquí a nueve meses, pero no puso plazos al acuerdo con Siria. Para él es prueba de esa falta de voluntad negociadora que Damasco cobije a los dirigentes de los 10 grupos palestinos que se oponen con virulencia y amenazas a la política de Arafat. Israel teme acciones violentas de los radicales palestinos que rechazan el acuerdo de Washington. Ayer, las fuerzas de seguridad fueron puestas en estado de alerta ante las celebraciones del Año Nuevo judío.

El líder de la OLP fue recibido como un héroe en Túnez, donde el Consejo Nacional Palestino (Parlamento) deberá ratificar dentro de un par de semanas el acuerdo sobre la autonomía de Jericó y Gaza Páginas 2 y 3