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Nuevas pistas sobre la implicación del ex PCI italiano en Manos Limpias

El Partido Democrático de la Izquierda (PDS), antiguo Partido Comunista de Italia (PCI), puede estar en el centro de un nuevo filón en la investigación abierta por el juez Antonio di Pietro, quizá el más conocido de los magistrados milaneses de la Operación Manos Limpias. Di Pietro está analizando el papel del PDS en la gestión de los Ferrocarriles del Estado cuando era presidente de la entidad Ludovico Ligato, implicado en un escándalo que se llamó las sábanas de oro y que fue asesinado en el verano de 1989.

Según el semanario italiano Il Mondo, la investigación parte de las declaraciones de Pietro Marti, ex consejero delegado de la compañía de seguros Centrofaro, referentes a contratos de seguros en los Ferrocarriles del Estado. Estos contratos escondían presuntamente acuerdos del consejo de administración para suministrar dinero a los partidos, entre ellos al comunista.La noticia llega en medio de la tormenta interna que está atravesando el grupo de magistrados anticorrupción de Milán, por el enfrentamiento habido entre su coordinador, el juez Gerardo D'Ambrosio, y Tiziana Parenti, quien, ajuicio de D'Ambrosio y del resto de sus colegas, ha implicado con, demasiada premura en el cobro de comisiones ilegales al senador y tesorero del PDS Marcello Stefanini.

Parenti replica que ni uno de sus compañeros ha levantado un dedo para defenderla y que desde que trabaja con los jueces de la Operación Manos Limpias nunca ha sido invitada a una reunión. D'Ambrosio ha llamado a Parenti ala derecha.

La investigación objeto de la polémica implica a Primo Greganti, un ex funcionario del PCI de Turín detenido hace meses, titular de una cuenta en Suiza llamada Gabbietta (jaulita), en la que un empresario llamado Panzavolta depositó 621 millones de liras (alrededor de 55 millones de pesetas). Greganti siempre sostuvo que la cuenta era sólo suya y no del partido, pero la juez Tiziana Parenti afirma que el dinero terminó en manos del senador Marcello Stefanini para financiar las actividades del PCI.

Además, la magistrada dice tener pruebas de que otros 1.050 millones de liras procedentes de Berlín sirvieron presuntamente para mitigar las deudas de Ecolibri, una empresa de personas próximas al PCI. Esta segunda cantidad no figura, sin embargo, en el aviso de apertura de sumario que Tiziana Parenti ha mandado al tesorero del PDS.

La fiscalía milanesa no ha enviado al Parlamento ninguna petición para que sea levantada la inmunidad parlamentaria al senador Stefanini y poder proceder contra él, lo que el juez Gerardo D'Ambrosio señala como síntoma de que era prematuro implicarle en la investigación Manos Limpias. Sin embargo, su colega Parenti replica que ella ya ha escrito el borrador de la solicitud al Senado y se lo ha entregado al propio D'Ambrosio.

La posible implicación del PDS en las investigaciones sobre corrupción -después de haber sido involucrados en el escándalo los anteriores secretarios' de los partidos socialista, democristiano, republicano, liberal y socialdemócrata- ha derivado en el primer conflicto en el interior del grupo de jueces milaneses que luchan contra el sistema de comisiones ilegales.

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