Fraga anuncia que no polemizará con sus rivales en la campaña gallega

El Partido Popular evitará la confrontación directa con sus rivales durante la campaña a las elecciones autonómicas gallegas del próximo 17 de octubre, según anunció ayer el presidente de la Xunta y candidato a la reelección, Manuel Fraga. "Vamos a polemizar muy poco. Pondremos los datos sobre la mesa para que se compare lo que ha hecho cada uno", sentenció Fraga tras firmar el decreto que disuelve el Parlamento autónomo. El líder de los populares gallegos consideró legítimo que la Xunta realice una campana institucional para explicar su gestión en los últimos cuatro años.A pesar de las ácidas descalificaciones que se han intercambiado en los últimos días dirigentes del PP y del PSOE, Fraga aseguró que dedicará la campaña básicamente a informar sobre las realizaciones de su Gobierno.

En esta línea evitó las críticas directas a los socialistas, aunque sí arremetió con dureza contra el Bloque Nacionalista Galego (BNG) -que se ha mostrado dispuesto a gobernar con el PSOE- al que acusó de "miseria moral, incapacidad intelectual y resentimiento".

El presidente de la Xunta ya ha dispuesto que la administración autonómica realice, con fondos públicos, una campaña institucional para explicar sus cuatro años de gestión. Fraga justificó esta medida porque, según dijo, "el Gobierno está obligado a explicar lo que ha hecho". "Es una obligación, no un derecho", insistió después de asegurar que la campaña será "neutral".

Ley electoral

Los comicios del 17 de octubre se celebrarán con una nueva ley electoral, aprobada en solitario por el PP, que impone un límite mínimo del 5% de los votos para que se pueda obtener escaño en una circunscripción. Según Fraga, esta normativa "clarificará las opciones y asegurará una mayor representatividad del Parlamento".El presidente de la Xunta quitó importancia a las denuncias del PSOE sobre el desvío de 6.660 millones de pesetas presupuestarios en principio para inversiones y que el Ejecutivo gallego podrá repartir ahora discreccionalmente tras incluirlos en el programa de "imprevistos". Según Fraga, la ley otorga a la Xunta facultades para cambiar el destino de esos fondos. Los socialistas volvieron a insistir ayer en que la irregularidad de la operación presupuestaria.