Izetbegovic cede y acepta la partición de Bosnia

La resistencia del presidente Alia Izetbegovic a la división étnica tripartita de Bosnia-Herzegovina quedó rota ayer. Sometido a masivas presiones y amenazas entremezcladas con promesas de protección y ayuda para el caso de que se avenga al plan auspiciado por Serbia, Croacia y los mediadores internacionales, el presidente bosnio renunció a continuar una resistencia que ya consideran inútil hasta sus más íntimos colaboradores. Los mapas para la división étnica ya están sobre la mesa en Ginebra, después de que Izetbegovic llegara, en una tumultuosa reunión que acabó en la madrugada de ayer, a un principio de acuerdo con toda la delegación bosnia. Todas las partes en conflicto acordaron también un alto el fuego general, que debe entrar hoy en vigor.

ENVIADO ESPECIAL, Aunque se mantenía ayer un bloqueo informativo sobre el transcurso de las negociaciones territoriales, era evidente que la posición negociadora de Alia Izetbegovic era ya de tal debilidad que habría de conformarse con lo que los mediadores quieran o puedan arrancar al líder serbio Radovan Karadzic y a su mentor, Slobodan Milosevic, presidente de Serbia.Aún no había en Ginebra información sobre los efectos que esta aceptación de hecho de la división étnica de Bosnia pueda tener entre las filas de combatientes leales a Sarajevo. Pero en la delegación bosnia se tenía la certeza de que la única alternativa a esta capitulación simulada era el abandono de la conferencia con la inminente amenaza de una ofensiva general serbia.

Ayer, los mediadores internacionales David Owen y Thorvald Stoltenberg anunciaron un "acuerdo entre todas las partes" para un inmediato alto el fuego en toda la república, y la convocatoria de reuniones diarias de sus máximos jefes militares Para dirimir responsabilidades en posibles violaciones. "Quien prosiga ahora los combates será un insensato", manifestó Slobodan Milosevic, cuyas ambiciones están cada vez más cerca de verse legitimadas en esta conferencia.

También se anunció oficialmente la nueva propuesta de la mediación internacional, de transformación del Estado bosnio en una "unión de repúblicas de Bosnia-Herzegovina". Según los mediadores occidentales, esta unión juntará elementos tanto de la propuesta serbia y croata de confederación como de la federativa presentada inicialmente por el Gobierno de Sarajevo. Tres repúblicas establecidas por criterios étnicos reflejarán con ciertas correcciones el estado actual.

Karadzic dijo ayer que el nuevo plan es "aceptable". Por la noche, el primer ministro bosnio, Mile Akmadzic, aseguró que era previsible un compromiso por parte de las tres facciones, incluida la musulmana.

Liquidación de un Estado

EL PAÍS tuvo ayer acceso a la propuesta de los mediadores, que establece tres ciudadanías distintas, ningún poder federal, ni siquiera una unidad monetaria, y permite a los tres Estados adherirse a acuerdos internacionales. Esta propuesta liquida todo vestigio de un Estado tal como se entiende en la época moderna.La parte musulmana será la única que no tendrá unidad territorial, ya que se compondrá a grandes rasgos del triángulo Tuzla-Sarajevo-Zenica, con un prometido, pero muy difícilmente defendible, corredor hasta el Adriático, y dos posibles ampliaciones: hacia el sureste y hacia el pequeño y aislado enclave de Bihac, en el noroeste.

Fuentes bosnias descalificaban ayer esta fórmula, aún antes de ser explicada, como "un intento de confundir a la opinión pública internacional presentando la solución como la supervivencia del Estado".

Desde ayer, las delegaciones en la conferencia de Ginebra trabajan intensamente sobre los mapas para establecer la división étnica. Los mediadores internacionales, representantes de Estados Unidos y Rusia, aseguran ahora a Izetbegovic que el Estado de mayoría musulmana que emergerá de esta división junto a una república serbia y otra croata, será económicamente viable. El enviado especial norteamericano, Reginald Bartholomew, ofreció ayuda económica al miniestado de mayoría musulmana que habrá de emerger de la división, y el de Rusia, Vitali Churkin, se esforzó por lograr algunas concesiones serbias que permitan a la mediación internacional presentar la propuesta que se impone al Gobierno bosnio como una solución de compromiso.

Con los mapas que se perfilan como base para las negociaciones detalladas que podrían aún prolongarse, los únicos grandes beneficiarios resultan ser los serbios, que consiguen una unidad territorial entre todas sus conquistas y la república de Serbia. El Gobierno de Bosnia recurrió de nuevo ayer al Tribunal Internacional de La Haya para que impida la anexión de parte de su territorio por Serbia. En cuanto a los croatas, podrían recibir, mucho menos territorio que el que les otorgaba el fenecido plan Vance-Owen.

La noticias en Nueva York y Washington sobre la entrada en acción de la protección aérea de la OTAN para los cascos azules se enmarcan, según observadores en Ginebra, en esta operación de dar garantías de protección a las fuerzas bosnias siempre que acaten el plan propuesto.