Setién califica de "injusta" a condena al cura Treviño

El Obispado de San Sebastián cree que la elevación de la pena impuesta al arcipreste de Irún, José Ramón Treviño, es "desproporcionada", "dificílmente justificable e injusta". El Tribunal Supremo incrementó de tres a seis años la condena impuesta por la Audiencia Nacional al sacerdote por colaboración con ETA. Treviño albergó en su parroquia del Santo Cristo de Artigas, en Irún, a dos etarras, que acababan de matar a res muertos en Santander. El obispo donostiarra, José María Setién, convalenciente de una intervención quirúrgica, y el vicario general, José Antonio Pagola, visitaron ayer en la prisión de Martutene (Guipúzcoa) al sacerdote preso. El obispado cree que José Ramón Treviño ha trabajo intensamente en favor de la pacificación y defiende su "integridad moral y ética".El obispo considera que el tratamiento que la ley penal hace del delito de colaboración con el terrorismo abre la puerta a la aplicación de penas que, por su carácter desproporcionado, podrían ser calificadas como injustas". Setién defiende que "el derecho a actuar de cuerdo con los dictados de conciencia ética sea considerado y valorado como un auténtico bien social que la sociedad debe defender jurídicamente, en armonía con otros bienes sociales".

Setién se lamenta de la interpretación que hace el Supremo pata incrementar la pena, por cuanto que se puede caer "en una interpretación puramente pragmática de la función de la ley al servicio de intereses generales, en detrimento de valores personales como la fidelidad la conciencia".

Tomando como base ese análisis que se hace en la sentencia, el obispo de San Sebastián señala que no es de extrañar que la actuación de Treviño sea jurídicamene calificada como delito de colaboración con el terrorismo cuando, desde una perspectiva ética, habría de merecer un enjuiciamiento diferente.