Alemania se niega a bajar tipos pese a las tensiones monetarias

El Bundesbank hizo alarde, una vez más, de su independencia al mantener ayer los tipos de interés oficiales haciendo caso omiso de las tensiones que vive el Sistema Monetario Europeo. Ni el precario estado del franco francés, que, junto al marco, forma el eje central de la futura unión monetaria europea, ni las dificultades de la corona danesa o de la peseta le conmovieron.Apenas conocerse la decisión del Bundesbank, la divisa francesa cayó hasta los 3,4215 francos por marco, muy cerca de su límite de depreciación (3,4305), aunque al cierre logró recuperarse hasta 3,4150, en un clima de menor crispación. La peseta también soportó fuertes presiones, llegando a depreciarse hasta las 78,85 pesetas por marco, contaminada por las presiones que vive el SME. Al final de la jornada, la moneda española recuperaba terreno, cerrando a 78,50 pesetas, algo mejor que su cotización de la víspera.

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