_
_
_
_

La escuela de flamenco donde se rodó 'Carmen' cierra, pero con esperanzas

Juan Carlos Sanz

La principal escuela de baile flamenco de Madrid (26 profesores y 600 alumnos), instalada en la calle de Amor de Dios, 4 (distrito Centro), cerró ayer después de más de 30 años de existencia. Una docena de estudiantes y aficionados al flamenco permanecieron encerrados toda la noche en un vano intento por detener el desalojo de la academia, acordado por los propietarios del inmueble. La Comunidad negocia una prórroga para las clases en Amor de Dios mientras prepara un local alternativo en el metro.

Tanto la Consejería de Educación y Cultura como el Ministerio de Cultura intentan mantener la actividad de la escuela Amor de Dios -donde se rodó Carmen, de Carlos Saura- cuatro meses más, con el fin de evitar la dispersión de profesores y alumnos en pequeñas academias.Pero el director del centro de danza, Juan María Bourio, había llegado a un acuerdo con los propietarios del inmueble para desalojar la planta baja y el sótano, que alquiló hace 30 años, a cambio de una compensación económica. Bourio considera que la administración interviene "demasiado tarde" en Amor de Dios.

Para poder iniciar las negociaciones, el viceconsejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, Ramón Caravaca, recomendó a los encerrados en Amor de Dios que abandonasen el edificio. Esta condición la habían exigido tanto la empresa propietaria como los anteriores caseros -la compañía Alrevisa, que abonó la indemnización a Bouno- antes de plantearse una posibilidad de acuerdo.

Pero en cuanto la academia se quedó vacía, un grupo de trabajadores, ejecutando órdenes que ignoraban la posibilidad de que allí se prolongasen las clases una temporada, comenzó a desmontar sus instalaciones e incluso cortó la luz del sótano y rompió algunos espejos de las salas de baile. "Ha sido puro vandalismo", se quejaba la alumna María Moreno, después de haber pasado la noche en vela en la academia de Amor de Dios.

Joaquín San Juan, presidente de la Federación de Entidades Flamencas -que agrupa a 27 asociaciones- se quejaba con amargura: "Nos aseguraron que si abandonábamos el edificio se iniciarían las conversaciones, pero nos han dado con la puerta en las narices".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tras los pasos de Gades

La escuela de Amor de Dios -donde Antonio Gades dio sus primeros pasos de baile- tiene alguna oportunidad fuera de ese local. Hoy mismo, el viceconsejero de Cultura negociará con los propietarios la continuidad de la academia en Amor de Dios. "Les vamos a recordar que la Comunidad tiene que darles la autorización para rehabilitar el edificio, para que se lo piensen mejor", advertía ayer Caravaca. En principio, Cultura va a exigir que se reparen los desperfectos en el interior de la academia.

La Comunidad tiene otra opción: ofrecer a profesores y estudiantes de baile flamenco unos locales de 1.000 metros cuadrados en una nueva estación de metro de Vallecas, en la prolongación de la línea 1.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_