IU y cuatro asociaciones arrecian en sus críticas contra Miguel Solans
El informe de la Delegación del Gobierno sobre la delincuencia extranjera en Madrid siguió ayer provocando las críticas más duras. Izquierda Unida insistió en pedir la dimisión del delegado Miguel Solans una vez vista la nota aclaratoria difundida el martes, y SOS-Racismo anunció la presentación de una querella.A ambas organizaciones se sumaron tres asociaciones ciudadanas más. La organización Libres, Iguales, Solidarios envió un escrito al fiscal general del Estado, Eligio Hernández, por entender que el comunicado puede ser "constitutivo de múltiples delitos". El Comité de Defensa de los Refugiados, Asilados e Inmigrantes en España (Comrade) exigió la rectificación pública por parte del delegado, al considerar que el comunicado, además de reflejar "una actitud insolidaria y xenófoba", "falsea el significado de las cifras". Por último, el Centro de Investigaciones y Promoción Iberoamérica-Europa (Cipie) mostró su repulsa ante el informe por similares razones.
El comunicado emitido el pasado día 18 por la Delegación del Gobierno (véase EL PAÍS de ayer) ofrecía los datos referentes a la delincuencia de los extranjeros en Madrid durante el año 1992. El informe, titulado La influencia negativa de actuaciones delictivas de extranjeros, clasificaba a los extranjeros por e tipo de delitos que suelen cometer y daba cifras de detenidos, puestos a disposición judicial o indocumentados con porcentajes que parecían elevados. Una nota aclaratoria difundida el lunes puntualizaba que "de los 100.000 extranjeros que hay en Madrid, sólo 6.551 se vieron implicados en temas de seguridad ciudadana".
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