El líder de banca de UGT es partidario de abrir la transición para la sucesión de Redondo
El secretario general de la federación de banca de UGT, Jorge Diez, es partidario de abrir un periodo de transición en el sindicato para buscar al sucesor del líder del sindicato, Nicolás Redondo. Diez sugiere que sea una persona "nueva y con ideas modernas que pueda representar con dignidad a la UGT en el futuro". El responsable de banca ratificó su apoyo al futuro diálogo social con el Gobierno y la patronal, postura a la que se sumaba ayer la federación de transportes de la central que así lo defenderá en el comité confederal de la próxima semana, al igual que Cataluña, metal y construcción.
Jorge Díez, según informa EFE, declaraba ayer a un grupo de periodistas que el futuro secretario general de UGT deberá tener una concepción del sindicalismo acorde con la actualidad, deberá conectar con la sociedad y con los verdaderos problemas de los trabajadores y, sobre todo estar permanentemente abierto al diálogo. La figura de Nicolás Redondo, dijo, "está eclipsando la posibilidad de que surja una persona con talante nuevo para el futuro".El responsable de banca precisó: "Nicolás que se quede todo lo que crea conveniente, pero es evidente que no va a durar siempre y la cosa se complica si llegamos al momento de la sucesión con 18 ó 19 presidenciables".
La postura que Nicolás Redondo mantiene respecto a la negociación con el Gobierno ha salido, según Jorge Diez, claramente perjudicada por los resultados de las elecciones legislativas. Pese a esa crítica, asegura que la personalidad y el carisma de Redondo son incontestados en el seno de UGT y que es incuestionable su relevancia política y sindical; todo ello le permite, en su opinión, mantener una postura que cualquier otra persona no podría sostener desde la dirección de UGT.
Para el responsable de UGT de banca, el diálogo con el Gobierno debe darse sin condiciones previas. Asimismo señaló que si el sindicato hace una apuesta seria y decidida para negociar "el resultado lógico será el cambio de la política económica" que, en su opinión, no se producirá de antemano. "Ahora tenemos más bazas que antes", dijo, " porque ha habido un evidente debilitamiento del PSOE y Felipe González deberá asumir cosas que no ha asumido hasta ahora. Si conseguimos arrancar compromisos en la negociación, el cambio de la política económica y social vendrá por sí solo".
La postura favorable a un diálogo social sin condiciones previas, compartida por el responsable de banca de UGT y por las federaciones de Cataluña, metal y construcción, cuenta con nuevos apoyos en el seno del sindicato. Ayer lo declaraba así a EL PAÍS, Manuel García Taguas, secretario de acción sindical del transporte. Este sindicalista asegura que su federación cree necesario un pacto social y lo viene demostrando con los acuerdos de moderación salarial firmados en Iberia y Renfe. En la primera empresa han aceptado la congelación de salarios para mantener el empleo y reflotar la compañía. En Renfe, junto a un aumento salarial del 4% han acordado más de 6.000 jubilaciones anticipadas, tras convencer a los trabajadores de que es necesario.
García Taguas, en cuanto al pacto social global, defiende que no se fijen condiciones previas antes de sentarse a negociar. Su federación lo va a defender en el comité confederal de UGT que se va a celebrar la semana próxima, donde la central fijará su postura ante el diálogo social con el Gobierno y la patronal.
Pese a estas declaraciones de sindicalistas claramente favorables al pacto, ayer la ejecutiva confederal de UGT difundía un comunicado en el que acusaba a EL PAÍS de haber "puesto en marcha una de sus personales campanas, con un estilo que parece perpetuar de hecho la pasada campaña electoral, en esta ocasión intentando dividir internamente a los sindicatos mayoritarios en tomo al sí o no a un hipotético pacto social".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.