El escenario trae buenas notas

Copas en lugar de libros. Ayer, los estudiantes de la Autónoma -30.000 alumnos matriculados- celebraron en la hierba, y con el lema No al racismo, la tradicional Fiesta de la Primavera, epílogo del curso y prólogo de los exámenes finales. Por la tarde, la afluencia masiva de alumnos y amigos convirtió en un gran aparcamiento la autovía de Colmenar, a la que, por si fuera poco, también salieron los tanques de El Goloso.

La autovía fue una ratonera. A las 18.00 el trayecto desde Madrid hasta la Universidad Autónoma estaba totalmente atascado. La escasísima presencia de Guardia Civil de Tráfico nada podía hacer para deshilvanar la madeja de coches aparcados a lo largo de varios kilómetros en los arcenes de ambas calzadas. Los aparcamientos estaban repletos, y las entradas, taponadas. Sin duda acudió más gente que en un día lectivo.El caos se prolongó hasta El Goloso (a 17 kilómetros de Madrid), cuando desde el acuartelamiento militar sálieron tanques y piezas de artillería autopropulsada para cargarlos en la vía férrea.

"No al racismo" fue el lema de la convocatoria de la Autónoma este año. Nada recordaba que este campus fue el escenario de una pitada al presidente del Gobierno, Felipe González el 25 de marzo. "Los de los abucheos no son representativos; curiosamente, son los más críticos con la fiesta", decía una de las organizadoras, Mila Valcárcel, de la asociación Promoción y Desarrollo en Económicas y Empresariales.

A partir de mediodía, los jóvenes llenaron la explanada próxima al Rectorado. Poco después ocupaban el escenario los grupos musicales. Primero, tres que habían participado en el concurso de maquetas: Los Créditos, Los Mamíferos y Love of Tracy. Luego llegaron otros, como Los Incompletos o Café Cañamón. La lluvia apareció en ocasiones. Las facultades apenas tuvieron actividad. Hasta el Rectorado cerró a mediodía. Y muchos besos rodaron por el césped.