_
_
_
_

La mano del Bundesbank

El alivio de la peseta y la bajada de tipos en el mercado interbancario provocaron ayer una ligera subida de precios que quedé frenada a partir de la tarde. La decisión del Tesoro de dejar desierta por quinta vez consecutiva la subasta de letras dejó claro su deseo de no endeudarse a tipos altos y alentó una bajada de intereses de la deuda, mala para el inversor de renta fija, pero buena para el bolsista. Los inversores, sin embargo, siguen tomando precauciones y toman nota de que es la quinta subasta consecutiva que queda desierta.

La mayoría de las subidas se produjeron por la mañana, cuando el Bundesbank echó una mano a la peseta bajando los tipos de sus títulos con pacto de recompra (repos). La subida no rebasé el punto en cementos, siderurgia y servicios, lo que muestra la cautela de los operadores. La mayoría de la inversión permanece quieta. No sale papel a buen precio, lo que frena posibles subidas. Los inversores han decidido esperar y cortar el cupón del dividendo, lo cual, aunque no ha aumentado de forma sustancial en la mayoría de las empresas -sobre todo en bancos-, parece más sensato que vender a cupón corrido pensando en una subida cuando se despejen las presiones sobre la peseta por devaluación o por una recuperación.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_