ERC quiere explicar al empresario catalán que la independencia le beneficia

El líder de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Ángel Colom, hará de la burguesía catalana uno de sus principales objetivos electoráles en los próximos comicios. Colom, decidido a ganar cuota electoral a costa de Convergència i Unió (CiU) y a acabar con la imagen de que el partido independentista es una formación de jóvenes radicales, centrará buena parte de su esfuerzo en intentar convencer a los empresarios de que Jordi Pujol ya no defiende sus intereses.El mensaje de Colom será claro: ERC es la única fuerza capaz de garantizar a la burguesía catalana que "no seguirá sometida al expolio fiscal" de la Hacienda española. CiU, según el discurso de los independentistas, les ha abandonado al aceptar el nuevo modelo de financiación autonómica basado en la gestión del 15% del IRPF. Colom defenderá la tesis de que con la independencia -o, en principio, con un concierto similar al del País Vasco y Navarra- los empresarios pagarían menos y Cataluña aprovecharía mejor los recursos fiscales. Este mensaje será estrenado por ERC el próximo día 25 en Barcelona, en un acto en favor del concierto económico.

Colom admite que su partido no se había atrevido hasta ahora explicar con claridad que entre sus objetivos se encuentra la defensa de los intereses de la alta burguesía y de los pequeños empresarios, sectores que han confiado tradicionalmente en CiU.

Colom ha iniciado ya contactos con el empresariado catalán, en especial con la Cámara de Comercio y con la gran patronal, Fomento del Trabajo, donde las relaciones eran casi inexistentes.

Viaje a EE UU

Lo cierto es que hasta el momento Colom no ha tenido contestación interna: desde las garantías ofrecidas en las elecciones autonómicas de que una Cataluña independiente mantendría todos sus compromisos con el mundo occidental, hasta su inminente viaje a EE UU invitado por el Departamento de Estado. Una visita que relegará al olvido la imagen de un Colom radical lanzando pintura a una fragata de la Armada estadounidense en la campaña anti-OTAN, en 1986.

Colom, además, no tiene previsto diluir los puntos básicos de su programa estratégico con la vista puesta en la independencia en la primera década del siglo XXI, como ya explicó en Madrid en septiembre de 1991.

ERC mantendrá, pues, su programa: proclamación de la independencia por el Parlamento catalán el día que sus partidarios consigan la mayoría; convocatoria de un referéndum que debería ratificarla; proceso negociado con España de separación de bienes y de división de las fuerzas armadas; mantenimiento pleno de Cataluña en la CE y asunción de los compromisos con la OTAN y la UEO; declaración del catalán como única lengua oficial, con enseñanza del castellano y el inglés. La adopción de la nacionalidad catalana sería voluntaria y la política migratoría, la establecida por la CE.