Benegas puso su cargo a disposición de González tras comparecer éste en la Autónoma de Madrid

El secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, puso su cargo a disposición del líder del partido, Felipe González, el jueves de la pasada semana, tras conocer la intervención de éste en la Universidad Autónoma de Madrid, donde manifestó que estaba dispuesto a asumir las responsabilidades políticas del caso Filesa. No es la primera vez que Benegas lo hace a lo largo de los últimos tres meses. Las manifestaciones públicas de algunos ministros y dirigentes socialistas en las últimas horas, pidiendo medidas concretas para la comisión ejecutiva, convocada el próximo lunes, han hecho que Benegas reconsidere su actitud.

Ayer existía un profundo malestar en la Moncloa por el cúmulo de declaraciones, ya que "bloquea cualquier decisión drástica que pudiera tomarse en la ejecutiva socialista". El propio Felipe González rehusó hablar ayer de nuevo sobre estos problemas. "Ya he dicho todo lo que tenía que decir", dijo lacónicamente González, remitiéndose a sus declaraciones del pasado jueves en la Universidad Autónoma de Madrid.El secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, se puso en contacto con Felipe González el día 25, por la tardé, tras conocer que el jefe de Gobierno había declarado en la Universidad Autónoma de Madrid que estaba dispuesto a asumir las responsabilidades políticas del caso Filesa, incluida la dimisión si a él le alcanzaba esa responsabilidad. Benegas dijo a Felipe González: "Tú no debes cargar con esa responsabilidad. Antes la asumo yo", señaló el secretario de Organización.

A la espera del lunes

Sin embargo, Benegas ha reconsiderado su actitud en las últimas horas al conocer, a través de los medios de comunicación, que algunos ministros y dirigentes del PSOE pedían públicamente su dimisión y se mostraban favorables a que esa medida contra Benegas se plasmara en la comisión ejecutiva del partido convocada para el próximo lunes para hablar precisamente de las consecuencias del caso Filesa.

Algunos ministros y dirigentes socialistas han cambiado su actitud inicial de postergar las cuestiones internas de partido a la cebración de las elecciones legislativas, ante los acontecimientos registrados en los últimos días.

Según las fuentes consultadas, tras la reunión del comité federal del pasado mes de enero y del encuentro que Felipe González mantuvo con los secretarios regionales del PSOE en la Moncloa, a principios del mes de marzo, se optó por postergar los conflictos internos y actuar unitariamente, "siempre que hubiese una unidad de mensajes y de organización para la campaña electoral".

A juicio de estas fuentes, "el informe de los peritos sobre el caso Filesa ha caído como una losa sobre la actividad del partido y del Gobierno. Nuestros mensajes no llegarán a la sociedad mientras no demos una solución a este problema". "¿Cómo vamos a presentar en el debate sobre el estado de la nación un paquete de medidas contra la corrupción que tenga credibilidad, si antes no hemos dado una solución al caso Filesa?".

Las declaraciones de Alfonso Guerra, en León, el pasado jueves,

,contradictorias con las que Felipe González había realizado ocho horas antes en la Universidad Autónoma de Madrid, también contribuyeron a que estos dirigentes decidieran pasar a la acción. "No se puede hacer oídos sordos al caso Filesa como hizo Alfonso Guerra en León, cuando Felipe González, ocho horas antes, había dicho que estaba dispuesto a asumir responsabilidades políticas por el caso. El choque de dos vectores opuestos da una fuerza cero y así no podemos continuar", añadieron las fuentes socialistas consultadas.

Este grupo de dirigentes cree que su actitud de exigir responsabilidades en la comisión ejecutiva del lunes cuenta con la complicidad de González y de numerosos cuadros del partido, al margen de sus tendencias respectivas. "Felipe González está predispuesto a dar el paso de exigir responsabilidades ya. Esa predisposición necesita contar con un respaldo", manifestaron las fuentes consultadas.

Este punto de vista no es compartido por los miembros de la cúpula del PSOE. Además del malestar que han suscitado las declaraciones públicas, creen que, "si en estos momentos algunos dirigentes del partido asumen su responsabilidad, el Partido Popular no se contentará y pedirá, a continuación, la cabeza de Felipe González".

En esta situación, numerosos diputados y cuadros del PSOE manifestaron ayer su desconcierto y lo expresaron así: "Una vez más, a Felipe González le toca realizar la cuadratura del círculo".

A lo largo de la jornada de ayer, nuevamente se produjeron reacciones de dirigentes socialistas sobre la conveniencia de asumir responsabilidades en el partido por Filesa. A lo largo de la mañana, dirigentes del ala renovadora continuaron diciendo, como el día anterior, que tenían que rodar cabezas en la dirección del partido. A mediodía, las declaraciones fueron atemperándose, posiblemente tras conocer que el tono de las mismas estaba provocando una airada reacción en Moncloa.