El paro en el mundo creció el año pasado en tres millones de personas, según la OIT
La Confederación Europea de Sindicatos hizo ayer un llamamiento a los trabajadores para que secunden las protestas del 2 de abrid y reclamen una Europa más social. Otro eje de la jornada será el paro, que en 1992 creció en tres millones de personas en todo el mundo.
El comité ejecutivo de la confederación sindical se reunió ayer en Bruselas para concretar la primera movilización de los trabajadores europeos, en la que se reclamará una Europa de progreso económico y social. El secretario general de la CES, Emilio Gabaglio, justificó las protestas en la necesidad de construir un espacio europeo en el que la solidaridad, la justicia y la tolerancia primen sobre otros valores".El dirigente sindical añadió que "cuando la cifra de parados en la CE ha llegado a los 18 millones de personas y el deterioro de la situación económica y social amenaza con recaer con más fuerza sobre las espaldas de los trabajadores, es necesario exigir un relanzamiento de la economía dirigida expresamente a la creación de empleo".
La CES pedirá a la presidencia danesa de la Comunidad Europea que la próxima cumbre de Copenhague, prevista para finales de junio, esté fundamentalmente dedicada al problema del paro.
Informe de la OIT
El desempleo es también una prioridad para. la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que ayer daba a conocer un informe en el que se dice que, durante el último año, el número de desempleados en el mundo aumentó en 3,1 millones de personas. En los países de la OCDE, el número de parados se situó en 32,3 millones, un 8,2% de la población activa, frente al 7,41/6 de 1991, según el citado informe sobre El trabajo en el mundo.
El empleo aumentó en 1992 en Japón, Estados Unidos y en algunos países de Europa occidental pero no suficientemente para compensar las pérdidas de puestos de trabajo experimentadas en Alemania, España, Gran Bretaña y Suiza, así como en los países escandinavos.
Además de destacar la continuidad del alto índice de desempleo, el informe contiene los resultados de una encuesta "inquietante" sobre numerosas prácticas de trabajo forzado, principalmente en Sudán, Pakistán y la India y evoca las presiones constantes que sufren los sindicatos en un periodo de mutación de la estructura de trabajo. "En este nuevo periodo, las relaciones entre empresarios y trabajadores se encuentran cada vez más deterioradas, los primeros en una actitud ofensiva obteniendo ventajas de la crisis, y los segundos, a la defensiva", según Walter van Ginneken, experto responsable de la edición del informe de la OIT.
