Toma de beneficios e indecisión en los mercados
Wall Street volvió a acusar ayer el impacto de unos datos económicos que se empeñan en demostrar que la recuperación económica se produce a un ritmo mucho más lento del esperado y que puede dar lugar, además, al mantenimiento de algunos desequilibrios importantes, como puede ser el desempleo.En la última semana de febrero se registraron un total de 25.000 nuevas peticiones de subsidio de desempleo, al tiempo que las venta al por menor de dinero fueron revisadas a la baja hasta anular el crecimiento anunciado y las de febrero han subido tan solo un 0,3%. La Bolsa reaccionó de una forma un tanto confusa ante estos datos, con altibajos de poca importancia que, no debe olvidarse, se producen en un mercado que se encuentra cerca de sus máximos históricos. Tras ceder cerca de 18 puntos y remontar esa pérdida, el Dow Jones bajó al final 21,34 puntos para llegar a 3.457,0 puntos. Los mercados europeos reaccionaron tibiamente ante lo que parecen ser evidencias de que el Bundesbank va a bajar sus tipos de interés a la semana que viene, una situación que lleva a sospechar que esa posibilidad está descontada suficientemente.
Francfort ganó un 0,45%, París cedía un 0, 17% y Londres terminó perdiendo un 0,11%, con el común denominador para todos estos mercados de haber sufrido numerosos altibajos a lo largo de la sesión.
La Bolsa de Tokio terminó subiendo 46 yenes en una jornada plena de nervios y de actividad. El índice Nikkei acusó los diferentes criterios de los inversores con una volatilidad muy elevada que le llevó hasta el 18.104 como cuota más alta de la sesión y al 17.735 como nivel más bajo. Al cierre, se situaba en el 17.904.
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